Los neozelandeses acuden a las urnas el sábado en unas elecciones generales que podrían ver al primer ministro Chris Hipkins continuar el reinado laborista otros tres años o un giro hacia los conservadores liderados por Christopher Luxon.

El líder del Partido Laborista, Hipkins, de 45 años, y el líder del Partido Nacional, Luxon, de 53, se enfrentan para formar el 54º parlamento del país.

Las puertas de los colegios electorales se abren a las 9 de la mañana (2000 GMT del viernes), aunque más de un millón de votantes ya han depositado su voto.

Existen restricciones sobre lo que los medios de comunicación pueden informar acerca de la contienda hasta el cierre de las urnas a las 19.00 horas del sábado, tras lo cual se espera que la Comisión Electoral comience a publicar los resultados preliminares.

Los votos especiales, que incluyen las papeletas de los neozelandeses en el extranjero y de quienes votan fuera de sus circunscripciones de origen, no se darán a conocer hasta el 3 de noviembre.

Nueva Zelanda pasó a un sistema proporcional de miembros mixtos en 1996. En las elecciones de 2023, un partido o una coalición necesita 61 de los 120 escaños del Parlamento -por lo general, alrededor del 48% de los votos- para formar gobierno. Habrá una elección parcial en noviembre que añadirá un escaño más.

Esto significa que los partidos minoritarios suelen desempeñar un papel influyente a la hora de determinar qué partido mayoritario gobierna.