Por Steve Holland, Andrea Shalal y Jeff Mason

WASHINGTON, 4 jul (Reuters) - El presidente Joe Biden se enfrenta a un estrecho escrutinio en sus apariciones públicas el jueves y durante el fin de semana festivo en Estados Unidos, en momentos en que resiste la presión para poner fin a su candidatura a la reelección tras un pobre desempeño en un debate que generó preocupaciones sobre su agudeza mental.

El vacilante desempeño del demócrata de 81 años en un debate el 27 de junio con su rival republicano Donald Trump ha generado dudas sobre su capacidad para mantener un ritmo agotador de trabajo durante los próximos cuatro años y medio y llamados de algunos miembros de su partido a hacerse a un lado.

La vicepresidenta Kamala Harris es la principal figura demócrata que podría tomar la candidatura en las elecciones del 5 de noviembre si Biden se retira, según han dicho fuentes, aunque sus aliados creen que puede calmar las preocupaciones de los votantes y donantes.

Biden ha sido el anfitrión de las festividades anuales del Día de la Independencia del 4 de julio en la Casa Blanca el jueves, dará una entrevista a ABC News el viernes que se transmitirá íntegramente a las 0000 GMT del sábado, al tiempo que viajará a Wisconsin el mismo día para una reunión de su campaña.

Decenas de demócratas en la Cámara de Representantes están observando de cerca y preparados para pedirle a Biden que se haga a un lado si no logra dar una buena impresión en la entrevista con ABC, dijo una fuente a Reuters.

Los demócratas consideran fundamental capturar el control de la Cámara baja en noviembre, ya que podría ser su último control del poder en Washington si Trump regresa a la Casa Blanca y los republicanos capturan el Senado.

Biden enfrenta una nueva realidad desde el debate de la semana pasada: incluso si no flaquea verbal o físicamente, es probable que persistan serias preocupaciones sobre su viabilidad como candidato. Si arrastra las palabras o parece desenfocado o confundido, enfrentará una renovada presión para irse.

Si es reelecto, Biden tendría 86 años al final de un segundo mandato. Algunos antiguos partidarios le están pidiendo que se retire para preservar su legado y disminuir las posibilidades de una segunda presidencia de Trump. A sólo cuatro meses de las elecciones, dicen que es necesario tomar una decisión pronto.

Los demócratas, incluidos sus principales aliados, han dejado la puerta abierta a que Harris encabece la lista demócrata.

La Casa Blanca ha dicho repetidamente que el presidente sufría un resfriado y un desfase horario la noche del debate.

El miércoles, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, dijo que Biden no se había sometido a ningún tipo de examen médico desde su control físico anual en febrero. "No fue examinado por el médico. Es un resfriado, muchachos. Es un resfriado", dijo en una conferencia de prensa.

Sin embargo, el portavoz Andrew Bates dijo el jueves que Biden visitó a un médico después del debate. "Varios días después, el presidente fue a revisar su resfriado y se estaba recuperando bien", sostuvo.

(Reporte de Steve Holland, Andrea Shalal y Jeff Mason. Editado en español por Marion Giraldo)