El anuncio del domingo se produjo poco más de una semana antes de que Yoon celebre su ceremonia de investidura el 10 de mayo.

Kim Sung-han, profesor de la Universidad de Corea y ex viceministro de Asuntos Exteriores, fue nombrado asesor de seguridad nacional del presidente, tras haber sido asesor de política exterior en el comité de transición de Yoon.

Choi Sang-mok, ex viceministro de Finanzas, que también ha formado parte del comité de transición, fue nombrado máximo asesor de política económica.

La nueva administración se enfrenta a retos diplomáticos como el fortalecimiento de los lazos con Estados Unidos y la pacificación de las relaciones con sus vecinos Japón y China. Las relaciones con Pyongyang, en medio de las crecientes tensiones por las actividades nucleares y de misiles de Corea del Norte, son también una de las principales prioridades.

La profundización de la desigualdad económica y los precios de la vivienda, que se han disparado hasta alcanzar nuevas cotas con el presidente saliente, Moon Jae-in, son también retos acuciantes para la administración entrante.

También se anunciaron otros altos cargos, como Kim Yong-hyun, antiguo director de operaciones del Estado Mayor Conjunto, como jefe del Servicio de Seguridad Presidencial, y Ahn Sang-hoon, profesor de la Universidad Nacional de Seúl, como asesor de política social de Yoon.