J.P. Morgan afirmó el martes que la propagación del conflicto en Oriente Próximo sigue siendo un riesgo creciente para los mercados energéticos.

Los ataques con aviones teledirigidos provocarán probablemente una reducción de la capacidad de refinado y exportación de Rusia y añadirán incertidumbre al mercado mundial del petróleo, lo que afectará sobre todo a los mercados de productos petrolíferos más que al del crudo, dijo el banco en una nota.

La refinería de petróleo de la ciudad rusa de Yaroslavl funciona con normalidad tras el intento de ataque con drones del lunes, según declaró el gobernador regional Mikhail Yevrayev. (Reportaje de Sherin Elizabeth Varghese en Bengaluru; Edición de Chizu Nomiyama)