El índice del dólar -que sigue al billete verde frente a seis grandes rivales- va camino de sufrir su primera caída mensual en cinco años, ya que la moneda refugio pierde fuelle tras un comienzo de año vertiginoso.

El índice del dólar se encamina a una caída de más del 1,5% en mayo, aunque sigue subiendo cerca del 6% en el año. La última vez que bajó fue un cuarto de punto en el día, a 101,44.

Es probable que el comercio sea ligero hasta el lunes, ya que los mercados de valores y de bonos estadounidenses cierran por el día festivo del Memorial Day.

Los datos del viernes mostraron que el gasto de los consumidores estadounidenses aumentó más de lo previsto en abril, ya que los hogares impulsaron las compras de bienes y servicios, y el aumento de la inflación se ralentizó.

Los analistas dijeron que los datos alentadores, junto con las apuestas sobre una senda de endurecimiento más cautelosa por parte de la Fed, estaban debilitando el dólar.

Las acciones europeas alcanzaron el lunes máximos de más de tres semanas, ya que la relajación de las restricciones de COVID-19 y los nuevos estímulos en China contribuyeron a mantener el optimismo de la semana pasada.

"Cómo se desenvuelva el consumidor estadounidense a partir de aquí y, desde una perspectiva global, cómo se comporte la economía china serán determinantes para el apetito de riesgo de los inversores en general", señalaron los analistas de divisas de MUFG en una nota.

Esta semana se publicarán otros datos económicos que podrían dar pistas sobre las perspectivas de crecimiento mundial, como las cifras de empleo en Estados Unidos y el índice de gestores de compras de China. Los datos de la inflación alemana se esperan hoy a las 1200 GMT, antes de las cifras de inflación de la zona euro del martes.

Según los datos de Refinitiv, se espera que la inflación anual alemana aumente hasta el 8%, tras haber alcanzado el mes pasado un máximo de cuatro décadas del 7,8%.

El euro alcanzó un máximo mensual frente al dólar de 1,07705 dólares, un 0,3% más, antes de los datos.

El yen, que es un refugio seguro, retrocedió un 0,2%, hasta 127,330 yenes por dólar.

La libra esterlina subió un 0,1% hasta los 1,26400 dólares.

Las criptodivisas intentaron un rebote, pero el bitcoin, que subió un 4%, sigue inmovilizado en torno a los 30.000 dólares.