Esto se compararía con el crecimiento del 8,7% del año anterior.

A principios de año, los economistas recortaron sus previsiones de crecimiento de la India para este año fiscal hasta situarlas en torno a la última proyección del gobierno, citando la ralentización de las exportaciones y los riesgos de que la elevada inflación mermara el poder adquisitivo.

A pesar de ello, se espera que la India siga siendo la segunda economía de más rápido crecimiento -sólo por detrás de Arabia Saudí- entre los países del G20, según la Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE).