Fundador de TickerTags, una empresa de inteligencia de datos sociales, Chris Camillo convirtió 83.000 dólares en 21 millones en 14 años, con una rentabilidad anualizada del 68%. Su historia, relatada en el libro "Unknown Market Wizards" de Jack D. Schwager y demuestra que un enfoque poco convencional del trading puede conducir a un éxito notable.

Cuando aún era un adolescente, Camillo frecuentaba las ventas de garaje y se dio cuenta de que ciertos artículos, como relojes y juguetes antiguos, solían estar infravalorados por los vendedores, lo que le permitía comprarlos a bajo precio y revenderlos a especialistas con beneficios.

Su primer negocio se inspiró en un cambio en su tienda de comestibles local: los frigoríficos de zumo Snapple estaban siendo sustituidos por bebidas Arizona. Con la ayuda de su hermano corredor de bolsa, invirtió 300 dólares en opciones de venta de Snapple, previendo que la empresa perdería cuota de mercado. La operación fue un éxito y triplicó su inversión. Con ello confirmó la teoría de los famosos Peter Lynch y Warren Buffett, que abogan por invertir en áreas que se conocen bien.

A continuación, se concentró en sus observaciones del comportamiento de los consumidores, en las tiendas, en las redes sociales y con sus allegados, para detectar las primeras tendencias aún no identificadas por los mercados ni por los institutos de sondeos. Se basó en datos no financieros, dejando de lado el análisis fundamental o técnico en favor de la recopilación de datos, para desarrollar lo que denominó "arbitraje social". Gracias a sus éxitos iniciales, profesionalizó sus métodos, obligándose a liquidar sus posiciones cuando los resultados financieros de una empresa confirmaban su intuición.

Posteriormente, esta técnica se impuso entre los inversores profesionales e institucionales. Entre los datos alternativos que ahora explotan estos últimos figuran los datos de las tarjetas de crédito que pueden adquirirse a los operadores, la información meteorológica, las acciones de las empresas, los datos de imágenes por satélite que muestran los índices de ocupación de los aparcamientos, etc.

Chris Camillo tampoco ha descuidado las conversaciones con dependientes o adolescentes, por ejemplo (que suelen estar detrás de la adopción masiva de gadgets o elementos de entretenimiento, antes de que los mercados se den cuenta o la tendencia llegue al gran público). También ha apostado a menudo por las pequeñas empresas, aquellas cuyo destino bursátil puede cambiar con un solo producto.