Los denominados swaps de incumplimiento crediticio de nombre único han sido objeto de escrutinio normativo después de que la caída y el rescate estatal de Credit Suisse desencadenaran una gran volatilidad en el mercado de CDS de algunos bancos sistémicos, Deutsche Bank en particular, el 24 de marzo.

"Una de las conclusiones sobre los acontecimientos del viernes 24 de marzo fue que los contratos de CDS de nombre único son opacos y carecen de liquidez", afirmó el órgano ejecutivo de la UE en un documento para una reunión de los Estados de la UE celebrada el jueves.

Esto explicaría por qué un único contrato de CDS, más bien pequeño, puede desencadenar grandes movimientos en el precio tanto de la deuda como de las acciones de la entidad de referencia del CDS, señala el documento, que propone "modificaciones específicas" de las normas de transparencia post-negociación del bloque para los derivados extrabursátiles.

La Comisión dijo que propone reinsertar las CDS de Santander, BNP Paribas, Credit Agricole, Deutsche Bank, ING Bank, Intesa Sanpaolo, Societe Generale y DZ Bank en el ámbito de las transacciones de derivados sujetas a la transparencia post-negociación.

Según el documento, la información incompleta y asimétrica de los contratos de CDS vinculados a bancos de importancia sistémica provoca inseguridad en los mercados durante las crisis.

"Un análisis comparativo de las normas de información pública post-negociación estadounidenses y europeas relativas a los CDS de nombre único demuestra dónde radica el problema: la asimetría de información entre dos mercados mundiales que invariablemente negocian CDS sobre las mismas entidades de referencia", añadía.