S-Oil, un exportador clave de productos que es propiedad mayoritaria de Saudi Aramco, ha suspendido la producción en las unidades de la ciudad de Ulsan como medida de precaución, ya que se encontraban cerca del incendio resultante, añadió la empresa en una presentación reglamentaria.

Se trata de su unidad de alquilación nº 2 y de las unidades de procesamiento cercanas, como la unidad de craqueo catalítico fluidizado de residuos (RFCC) nº 2 y la unidad de paraxileno (PX) nº 2, dijo.

"Estamos explorando las mejores soluciones para asegurarnos de que esto no cause ninguna interrupción en el suministro doméstico de productos de combustible", dijo el director ejecutivo Hussain Al-Qahtani en una conferencia de prensa.

La compañía utilizará plenamente sus existencias y su red nacional y extranjera en ese esfuerzo, añadió.

Se espera que el cierre tras la explosión del jueves por la noche, en la que murió una persona, afecte a los ya escasos suministros de gasolina en Asia, donde S-Oil es un exportador clave.

Puede hacer subir los márgenes de las refinerías asiáticas del combustible, que ya rondan un máximo histórico cercano a los 34 dólares por barril.

S-Oil explota dos unidades de alquilación, con una capacidad combinada de 9.200 bpd, para producir alquilados que se mezclan con la gasolina para aumentar su octanaje y calidad.

Los analistas de Citi esperan que la producción de gasolina de S-Oil se vea "gravemente afectada" a corto plazo, aunque podría comprar alquilados para mantener la producción.

La sustitución de la unidad afectada por el incendio podría tardar hasta dos años, tiempo durante el cual S-Oil podría exportar fuel-oil de muy bajo contenido en azufre, señalaron los analistas del banco en una nota.

Una persona murió y nueve resultaron heridas en la explosión, dijo el viernes un funcionario de los bomberos de Ulsan.