Es la segunda vez esta semana que los abogados tunecinos organizan una huelga en medio de una escalada de la crisis política en el país tras la detención de dos abogados y dos periodistas la semana pasada en incidentes separados.
Cientos de opositores al presidente Kais Saied protestaron la semana pasada exigiendo una fecha para la celebración de elecciones libres y justas. Saied, cuyo mandato finaliza este año, asumió la mayoría de los poderes del Estado y cerró el parlamento electo en 2021 en una medida que la oposición calificó de golpe de estado.
La policía tunecina irrumpió el lunes por segunda vez en dos días en la sede del colegio de abogados y detuvo a Mahdi Zagrouba, que ha criticado al presidente, tras detener el fin de semana a Sonia Dahmani, otra abogada.
Algunos partidos de la oposición describieron el asalto al edificio del Decanato de Abogados como "una conmoción y una escalada importante".
El Colegio de Abogados y grupos de derechos humanos afirmaron que Zagrouba fue torturado durante su detención y que presentaba graves contusiones y huellas de violencia.
El Ministerio del Interior negó enérgicamente las acusaciones y afirmó que el abogado no fue sometido a malos tratos ni torturas.
"Negamos categóricamente que el abogado fuera sometido a tortura o malos tratos. Se trata de una hipótesis para eludir su responsabilidad después de que se demostrara que agredió a un policía durante una protesta esta semana", declaró Fakher Bouzghaia, funcionario del ministerio.
Cientos de abogados se congregaron cerca de la sede del Palacio de Justicia, vistiendo uniformes y coreando eslóganes como "Quitad las manos de encima a periodistas y abogados" y "No al miedo, no al terror. El poder pertenece al pueblo".
Apoyando a su colega Zaqrouba, los abogados corearon "Mahdi no importa, las libertades se redimen con sangre".
Un juez tunecino ordenó el miércoles el encarcelamiento de dos periodistas a la espera de juicio, según informaron sus familias y abogados, lo que refuerza los temores de una campaña generalizada destinada a silenciar la disidencia y frenar la libertad de expresión.
Los periodistas de la radio IFM Mourad Zghidi y Borhen Bsaiss fueron detenidos el sábado por unos comentarios políticos realizados en la radio, según sus abogados.
