Ningún país ha reconocido a los talibanes, que se apoderaron de Afganistán con una rapidez y facilidad que tomó al mundo por sorpresa, tras lo cual el presidente Ashraf Ghani huyó del país y su gobierno se derrumbó.

Las fuerzas lideradas por Estados Unidos se marcharon dos semanas después en medio del caos.

Los fuegos artificiales de celebración fueron acompañados por intensos disparos aéreos de celebración en muchas zonas de Kabul.

Los talibanes también declararon el miércoles (31 de agosto) como día festivo para conmemorar el aniversario, según el Ministerio de Trabajo.