Los agricultores de Polonia y de otros países de la Unión Europea han estado protestando para exigir la reimposición de los derechos de aduana sobre las importacionesagrícolas procedentes de Ucrania que se suprimieron tras la invasión rusa de 2022.

Dicen que los agricultores ucranianos están inundando Europa con importaciones baratas que les dejan incapaces de competir.

"Es difícil esperar algún avance tras estas conversaciones, algún acuerdo concreto, por ejemplo sobre cuestiones agrícolas", declaró el jefe de la oficina del primer ministro, Jan Grabiec, a la agencia estatal de noticias PAP. "Seguimos dialogando y ambas partes -al menos por hoy- no están plenamente satisfechas".

Polonia ha estado estudiando un acuerdo de licencias para el comercio agrícola con Ucrania similar al acordado con Kiev por Rumanía y Bulgaria.

El miércoles, el ministro de Agricultura, Czeslaw Siekierski, declaró que había conversaciones en curso sobre un sistema de concesión de licencias a las exportaciones, pero que existían diferencias sobre la gama de productos que abarcaría.

Grabiec declaró que casi todo el gobierno ucraniano estaría representado en las conversaciones, que el viceministro de Asuntos Exteriores, Andrzej Szejna, declaró a la radio pública que también abarcarían la cooperación entre las industrias armamentísticas de los países, cuestiones culturales y energía.

Los embajadores de los países de la Unión Europea alcanzaron el miércoles un acuerdo revisado para ampliar las importaciones de alimentos libres de aranceles procedentes de Ucrania -con restricciones- después de que algunos estados, entre ellos Polonia, se quejaran de que el acuerdo original corría el riesgo de desestabilizar los mercados agrícolas del bloque.

Un diplomático de la UE dijo que el nuevo acuerdo -que se extendería hasta junio de 2025- era similar a un acuerdo provisional alcanzado la semana pasada, pero que cambiaba el periodo de referencia utilizado para determinar cuándo se aplicarían los aranceles a algunos productos.