Pieza central de los esfuerzos de la nueva administración proeuropea por desvelar la verdad sobre las supuestas irregularidades cometidas durante ocho años de gobierno nacionalista, la investigación también ha adquirido una nueva dimensión debido a las informaciones aparecidas en los medios de comunicación según las cuales miembros del anterior partido en el poder fueron a su vez víctimas del pirateo telefónico.

De confirmarse, tales informes podrían hacer saltar por los aires a una oposición que hasta ahora se ha mantenido unida en la defensa de su historial y de las actuaciones de los ministros que, según el nuevo gobierno, infringieron la ley.

La Comisión decidió el lunes que llamaría a declarar al líder del partido Ley y Justicia (PiS), Jaroslaw Kaczynski, a la ex primera ministra Beata Szydlo, al ex ministro de Justicia Zbigniew Ziobro y al ex ministro del Interior Mariusz Kaminski.

"Revelaremos la verdad", declaró Witold Zembaczynski, miembro de la comisión y de la mayor agrupación del nuevo gobierno, Coalición Cívica (KO), al canal de noticias estatal TVP Info. "Nuestro trabajo en la comisión investigadora provocará no sólo un terremoto, sino también un tsunami".

Las informaciones publicadas en 2021 por Associated Press de que el software, desarrollado por NSO Group, con sede en Israel, se utilizó para piratear los teléfonos de críticos con el gobierno, incluido el jefe de la campaña electoral del que entonces era el mayor partido de la oposición, suscitaron acusaciones de que los servicios de seguridad erosionaban las normas democráticas.

"Fue el comportamiento más antidemocrático durante el proceso electoral que es posible imaginar", afirmó el legislador del KO Jacek Karnowski, al parecer víctima él mismo del pirateo telefónico.

El nuevo gobierno se ha puesto manos a la obra para revisar los tribunales, los medios de comunicación estatales y las empresas controladas por el Estado en un intento de borrar lo que dice que son los efectos de la politización y el amiguismo bajo el PiS.

El PiS lo califica de caza de brujas política y afirma que siempre actuó legalmente.

"De acuerdo con la legislación polaca, toda vigilancia debe ser aceptada por un tribunal ... Estoy seguro de que todas las vigilancias realizadas por los servicios secretos fueron aceptadas y ordenadas por un tribunal", declaró el ex viceministro de Justicia Sebastian Kaleta.

Sin embargo, recientes informes de los medios de comunicación polacos sugirieron que el software espía podría haberse utilizado también contra políticos del PiS, una noticia que, de resultar cierta, podría tensar la lealtad de los legisladores.

"Me parece que esto puede ser, por desgracia, una prueba de fuego que (el PiS) no pasará necesariamente", dijo Anna Materska-Sosnowska, politóloga de la Universidad de Varsovia.