El embajador de Somalia ante las Naciones Unidas acusó el lunes a las tropas etíopes de realizar incursiones ilegales a través de su frontera común, lo que ha provocado enfrentamientos con las fuerzas de seguridad locales.

Al menos 3.000 soldados etíopes están destacados en el país del Cuerno de África como parte de una misión de mantenimiento de la paz de la Unión Africana (AMIS) que lucha contra al Shabaab, una milicia islamista que controla amplias zonas de Somalia.

Otros 5.000-7.000 soldados etíopes están destacados en varias regiones en virtud de un acuerdo bilateral.

Un contingente de soldados etíopes cruzó a la región somalí de Hiraan para vigilar las amenazas de al Shabaab el sábado y se retiró el domingo, según dijeron a Reuters varios ancianos locales.

Los portavoces del ejército y del ministerio de Asuntos Exteriores de Etiopía no respondieron inmediatamente a una petición de comentarios.

El embajador de Somalia ante la ONU, Abukar Dahir Osman, declaró que la reciente "desventura" de Etiopía había obligado a su país a posponer la próxima retirada de las tropas de la ATMIS de julio a septiembre.

La ATMIS se ha comprometido a retirarse antes del 31 de diciembre, cuando se espera que una nueva fuerza más pequeña la sustituya.

A medida que avanza la reducción, con la salida de 5.000 de los cerca de 18.500 efectivos del año pasado, el gobierno ha proyectado confianza en que puede mantener la línea contra al Shabaab. Ha dicho que la nueva fuerza no debería superar los 10.000 efectivos y que debería limitarse a tareas como asegurar los principales núcleos de población.

Las relaciones entre Mogadiscio y Addis Abeba se deterioraron a principios de este año después de que Etiopía, que no tiene salida al mar, acordara arrendar 20 km (12 millas) de costa de Somalilandia, una parte de Somalia que reclama la independencia y goza de autonomía efectiva desde 1991, pero que no ha logrado el reconocimiento internacional.

Etiopía ofreció a Somalilandia un posible reconocimiento a cambio de que se le permitiera establecer allí una base naval y un puerto comercial, una medida que Mogadiscio ha calificado de ilegal.