El número de adquisiciones de empresas por parte de entidades chinas en Europa cayó de 139 en 2022 a 119 en 2023, según el estudio, publicado el martes.

En Alemania, el número aumentó de 26 a 28, pero fue significativamente inferior al año récord de 2016, cuando se produjeron 68 adquisiciones chinas en la mayor economía de Europa.

El año pasado, Alemania dio a conocer una nueva estrategia sobre China en la que advertía de que las inversiones directas chinas en el país planteaban desafíos, ya que China fusionaba la política civil y militar. Berlín dijo que las inversiones chinas no debían suponer un riesgo para la seguridad alemana, por ejemplo a través de tecnologías sensibles.

A pesar de la modesta actividad transaccional, sigue existiendo un interés considerable entre los inversores chinos por las adquisiciones en Europa y, sobre todo, en Alemania, afirmó Yi Sun, responsable de China Business Services en Europa Occidental de EY.

"Sin embargo, las condiciones políticas y económicas no son precisamente favorables en estos momentos, y no se vislumbra una mejora significativa. Por tanto, las grandes operaciones seguirán siendo la excepción; en su lugar, continuarán predominando las transacciones de menor envergadura", añadió Yi Sun.