Los jueces Clive Lewis y Jonathan Swift admitieron a trámite un recurso sobre la política británica ante el Tribunal de Apelación.

El mes pasado, el Tribunal Superior dictaminó que era legal que Gran Bretaña llegara a acuerdos con el gobierno ruandés para enviar solicitantes de asilo al país, pero estimó los recursos legales interpuestos por ocho solicitantes de asilo individuales.

El primer vuelo de deportación previsto a Ruanda fue bloqueado en junio del año pasado por una sentencia de última hora del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, que impuso una orden judicial que impedía cualquier deportación hasta que concluyera la acción legal en el Reino Unido.