La empresa británica pretende desarrollar una gran planta para producir 2 gigavatios (GW) de hidrógeno verde, que se produce dividiendo el agua mediante energías renovables, con el fin de sustituir el hidrógeno contaminante utilizado para producir combustibles en la refinería de Castellón.

El proyecto, denominado HyVal, también triplicará la producción de biocombustibles de la refinería hasta alcanzar las 650.000 toneladas anuales en 2030, según informó BP en un comunicado.

El hidrógeno verde también se utilizará como materia prima en la producción de biocombustibles, incluido el combustible de aviación sostenible (SAF).

El hidrógeno limpio, una tecnología incipiente cuya producción sigue siendo limitada debido a los elevados costes, también se utilizará en industrias cercanas como la cerámica y la química.

Se espera que una primera unidad electrolizadora de hidrógeno de 200 megavatios esté operativa en 2027 y produzca hasta 31.200 toneladas de hidrógeno verde al año.

Bajo la dirección de su consejero delegado, Bernard Looney, BP pretende reducir su producción de petróleo y gas en un 25%, al tiempo que aumenta drásticamente su generación de energía renovable y la producción de combustibles bajos en carbono para 2030, con el fin de reducir drásticamente las emisiones de gases de efecto invernadero.

BP se ha fijado el objetivo de producir entre 0,5 y 0,7 millones de toneladas anuales de hidrógeno bajo en carbono para 2030.

España aspira a convertirse en un actor importante en la producción de hidrógeno bajo en carbono y biocombustibles gracias a su amplia energía solar y eólica y a su proximidad al mar.

La petrolera española Cepsa tiene previsto invertir 3.000 millones de euros (3.200 millones de dólares) en uno de los mayores proyectos de hidrógeno verde de Europa.

(1 dólar = 0,9425 euros)