CIFI dijo en una presentación que ha contratado a Haitong International Securities Company Limited como asesor financiero y a Linklaters como asesor jurídico para facilitar una reestructuración de su deuda extraterritorial de 6.850 millones de dólares, ya que es probable que se vea sometida a una presión continua para generar flujos de caja suficientes para los reembolsos.

Las acciones de CIFI se desplomaron un 25% tras la reanudación de su cotización el martes, frente a una subida del 2,2% del índice Hang Seng Mainland Properties. Están suspendidas de cotización desde el jueves.

El impago de CIFI es un nuevo golpe a una crisis de deuda cada vez más profunda en el sector inmobiliario chino, sobre todo porque CIFI se consideraba un promotor privado de mayor calidad con apoyo estatal en su financiación.

La empresa dijo el 13 de octubre que no había cumplido con ciertos pagos de intereses y amortizaciones en el extranjero debido a los retrasos en las remesas durante unas vacaciones prolongadas en la China continental. Los analistas dijeron que la obligación en cuestión era el pago del cupón de un bono convertible de 319 millones de dólares.

En la presentación del martes, CIFI dijo que el incumplimiento de sus obligaciones de deuda en el extranjero se debía a un mayor deterioro de las ventas y del crédito disponible para la industria en China desde septiembre y a una mayor presión de pago provocada por una rebaja de la calificación.

Pero añadió que sus problemas de deuda offshore no afectan materialmente a sus acuerdos de financiación onshore en su conjunto, y que sus operaciones comerciales siguen siendo normales.

CIFI dijo que se ha puesto en contacto con algunos acreedores para pedirles que formen un comité de coordinación y un grupo ad hoc de tenedores de bonos, a expensas de la empresa por su asesoramiento legal, para facilitar las conversaciones de reestructuración.