LISBOA, 2 may (Reuters) - El regulador de la electricidad de Portugal, ERSE, propuso una reducción del 2,6% en las tarifas reguladas en un intento de proteger a cientos de miles de consumidores de los precios disparados que afectan al mercado mayorista ibérico MIBEL.

"Esta revisión excepcional de las tarifas en 2022 es esencial para asegurar una mayor estabilidad tarifaria dada la alta volatilidad de los mercados energéticos y los precios anormalmente altos en los mercados mayoristas de electricidad", dijo el regulador ERSE a última hora del viernes.

ERSE dijo que el recorte sería posible debido a los "beneficios" mejores de lo esperado de la producción de energía eólica y solar, así como los contratos de compra de energía y los ingresos adicionales de las subastas de gases de efecto invernadero.

El recorte ayudaría a 921.000 consumidores portugueses con contratos basados en tarifas reguladas, principalmente hogares y pequeñas empresas, dijo ERSE. Representan el 15% del total de 6,4 millones de clientes del país.

ERSE dijo que tras el recorte las tarifas reguladas sólo aumentarían un 1,1% respecto al nivel medio de 2021. En Portugal, las tarifas reguladas sirven de referencia para las tarifas del mercado liberalizado y la mayoría de los distribuidores de electricidad tienen ofertas similares.

Los países europeos se esfuerzan por hacer frente a la subida de los precios del gas y la electricidad, impulsados por la invasión rusa de Ucrania, y por amortiguar su efecto sobre el poder adquisitivo.

Bruselas acordó la semana pasada permitir a España y Portugal poner un tope temporal a los precios de referencia del gas natural y el carbón utilizados por las centrales eléctricas de 40 euros por megavatio-hora.

El ERSE escuchará la opinión del consejo de tarifas de Portugal, que reúne a consumidores, empresas, Gobierno y municipios, cuya opinión no es vinculante, antes de tomar una decisión definitiva a mediados de junio.

El recorte entraría en vigor el 1 de julio y se mantendría hasta finales de año.

(Reporte de Sergio Goncalves; edición de Catarina Demony y Ed Osmond; traducción de Darío Fernández)