El mayor fabricante de materiales de construcción del país reservó una provisión adicional de 255 millones de dólares neozelandeses (151,73 millones de dólares) para su proyecto del Centro Internacional de Convenciones de Nueva Zelanda y el Hotel Hobson Street (NZICC) debido al aumento de los costes del proyecto.

Su beneficio neto anual después de impuestos fue de 235 millones de dólares neozelandeses, frente a los 432 millones del año anterior. Los analistas estimaban de media 318,7 millones de dólares neozelandeses, según los datos de Refinitiv.

"De cara al ejercicio fiscal de 24 años, esperamos que se produzca un nuevo ajuste en nuestros volúmenes globales, por lo que nuestro enfoque sigue centrado en unos buenos resultados de cara al cliente, el control de costes y la disciplina de precios en todos nuestros negocios", declaró Ross Taylor, Consejero Delegado.

La empresa declaró un dividendo final de 16 céntimos neozelandeses por acción, inferior a los 22 céntimos del año pasado.

(1 dólar = 1,6807 dólares neozelandeses)