El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, nombró el viernes a Raquel Buenrostro como ministra de Economía, poniendo a la jefa de la autoridad fiscal del país, que se hizo famosa reprimiendo a las grandes empresas por impuestos no pagados, en el lugar de dirigir los esfuerzos para arreglar una importante disputa comercial con Estados Unidos.

"Ella ha hecho un gran trabajo (como jefa de la autoridad fiscal)", dijo López Obrador en una conferencia de prensa regular, destacando la experiencia de Buenrostro en el sector público y su maestría en economía.

La ex ministra de Economía Tatiana Clouthier renunció el jueves, dejando a su ministerio sin un negociador clave en medio de las disputas comerciales con Estados Unidos y Canadá. No dijo por qué dejaba el cargo.

Buenrostro se convirtió en jefe de la autoridad fiscal del país, el SAT, a principios de 2020. López Obrador no nombró inmediatamente a su sustituto el viernes.

Como jefa de Hacienda, Buenrostro encabezó los esfuerzos para reprimir a los evasores de impuestos. López Obrador dijo el mes pasado que docenas de empresas debían un total de alrededor de 100.000 millones de pesos (4.990 millones de dólares) en impuestos.

La unidad mexicana de Walmart, Walmex, y la embotelladora de Coca-Cola, FEMSA, pagaron cientos de millones de dólares en impuestos en 2020 tras alcanzar acuerdos con las autoridades.

"(Buenrostro) pudo cosechar los beneficios de sus predecesores", dijo Miguel Ángel Estrella, un ex funcionario del SAT que ahora dirige una empresa de consultoría internacional.

"Estos procesos auditivos... tardan un año y ocho meses (por lo menos). Cuando se trata de un caso judicial, son de tres a cinco años", dijo Estrella.

Ahora, Buenrostro será el encargado de encabezar las discusiones con Estados Unidos y Canadá en el marco del pacto comercial regional USMCA, incluyendo una

disputa en curso

sobre energía.

La disputa, presentada por Estados Unidos y a la que se ha sumado Canadá, alega que el gobierno mexicano es lento en el otorgamiento de permisos energéticos y da prioridad a las empresas estatales, según fuentes de la industria.

"Si México hubiera seguido dando concesiones (energéticas)... habría sido realmente beneficioso para México", dijo Estrella, quien afirmó haber trabajado con una firma que optó por trasladar sus operaciones a Panamá en lugar de a México debido a las preocupaciones energéticas.

Antes de incorporarse al SAT, Buenrostro también trabajó en la unidad presupuestaria de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público y en Petróleos Mexicanos, la empresa petrolera estatal.

"No me queda claro si su perfil es el de una negociadora", dijo Estrella. (1 dólar = 20,0312 pesos mexicanos) (Reportaje de Kylie Madry; edición de Cassandra Garrison, Kirsten Donovan y Chizu Nomiyama)