PEKÍN, 7 sep (Reuters) - Las exportaciones y las importaciones de China cayeron en agosto, según mostraron los datos del jueves, ya que la doble presión de la caída de la demanda exterior y la debilidad del gasto de los consumidores presionó a las empresas de la segunda mayor economía del mundo.

Aunque las cifras comerciales superaron las expectativas de los analistas, éstas muestran que el sector manufacturero chino sigue sometido a importantes presiones y que los dirigentes económicos tendrán que centrarse en impulsar la demanda interna para apuntalar el crecimiento, después de que los pedidos de exportación y las piezas importadas frenaran la actividad de las fábricas el mes pasado.

Las exportaciones cayeron un 8,8% en agosto en tasa interanual, según mostraron el jueves los datos de aduanas, superando la previsión del 9,2% de un sondeo de Reuters y la caída del 14,5% de julio. Por su parte, las importaciones se contrajeron un 7,3%, por debajo del descenso del 9,0% previsto y de la caída del 12,4% del mes pasado.

La economía corre el riesgo de incumplir el objetivo de crecimiento anual de Pekín, en torno al 5%, ante el empeoramiento de la crisis inmobiliaria, la debilidad del gasto de los consumidores y la caída del crecimiento del crédito, lo que ha llevado a los analistas a rebajar las previsiones para este año.

Zhou Hao, economista jefe de Guotai Junan International, declaró: "Las cifras sugieren que persisten los vientos en contra, a pesar de cierta mejora marginal. De cara al futuro, que el crecimiento del comercio chino haya tocado ya fondo dependerá de varios factores, el más importante de los cuales es obviamente la demanda interna".

Pekín ha anunciado una serie de medidas en los últimos meses para apuntalar el crecimiento, como la suavización de algunas normas de endeudamiento la semana pasada por parte del banco central y el máximo regulador financiero para ayudar a los compradores de viviendas.

Sin embargo, los analistas advierten de que estas medidas pueden tener escaso impacto, ya que la recuperación del mercado laboral se está ralentizando y las expectativas de ingresos de los hogares son inciertas.

Los envíos de crudo aumentaron un 31% en agosto respecto al mismo periodo del año anterior y un 21% respecto a julio, mientras que las importaciones de soja en agosto también se dispararon un 31% respecto a hace un año, animadas por los precios baratos en Brasil.

China registró un superávit comercial de 68.360 millones de dólares en agosto, frente a los 73.800 millones previstos y los 80.600 millones de julio.

"Debido a la baja base de finales del año pasado, es muy probable que las exportaciones vuelvan a crecer a finales de este año", dijo Nie Wen, economista de Hwabao Trust.

(Reporte de Joe Cash, Ellen Zhang, Liangping Gao y Beijing Newsroom; Edición de Sam Holmes, editado en español por José Muñoz)