El prestamista con sede en Londres obtuvo un beneficio antes de impuestos de 3.150 millones de dólares en los tres meses finalizados el 30 de septiembre, lo que supone un descenso con respecto a los 5.400 millones de dólares de hace un año, frente a la media de 2.450 millones de dólares de las estimaciones de los analistas recopiladas por el banco.

Los resultados incluyeron una pérdida de valor de 2.400 millones de dólares, tras la reclasificación de las operaciones minoristas del banco en Francia como mantenidas para la venta.