Industrias Peñoles B de C : Informe del Director General 2022

Informe sobre la marcha de la Sociedad presentado por el

Director General al Consejo de Administración,

correspondiente al ejercicio fiscal de 2022

INDUSTRIAS PEÑOLES, S.A.B. DE C.V. Y SUBSIDIARIAS

Informe sobre la marcha de la Sociedad presentado por el Director General al Consejo de Administración, correspondiente al ejercicio fiscal de 2022.

Señor Presidente;

señoras y señores miembros del Consejo de Administración:

En mi carácter de Director General de Industrias Peñoles, SAB de CV (en adelante "la Sociedad"), y de acuerdo con lo establecido en la Ley del Mercado de Valores, a continuación someto a su consideración el Informe Anual correspondiente al desempeño y a los resultados obtenidos por la Sociedad durante el ejercicio fiscal de 2022, así como los Estados Financieros y sus notas de revelación, que incluyen las principales políticas y criterios contables y de información seguidos en la preparación del informe financiero que aquí se presenta.

En 2022, se desaceleró el ritmo de la actividad económica mundial, a pesar de que iba recuperándose paulatinamente de los peores efectos de la pandemia de covid-19. Además, en febrero estalló un conflicto geopolítico entre Rusia y Ucrania, lo que ocasionó una crisis energética y agudizó la inflación. Así, para contener la escalada de precios, los bancos centrales de las principales economías del mundo -incluida la mexicana- incrementaron de forma sucesiva las tasas de interés, particularmente durante la segunda mitad del año. Esto, aunado a la crisis inmobiliaria en China, ocasionó incertidumbre y temores de una nueva recesión.

En México, la inflación fue de 7.82% y el crecimiento del Producto Interno Bruto de 3.1%, respaldado por el fortalecimiento de la producción manufacturera y por las exportaciones. La tasa de interés interbancaria alcanzó niveles de dos dígitos, hasta llegar a 10.5% al cierre de 2022.

En este complicado entorno internacional, los precios de los metales mostraron muy alta volatilidad. El oro cayó de manera pronunciada tras llegar a un nivel histórico de US$2,000 por onza en marzo -debido a las tensiones geopolíticas y a la elevada inflación-, para recuperarse hacia finales del último trimestre, a medida que la Reserva Federal de Estados Unidos moderaba el alza en las tasas de interés y China relajaba las medidas de confinamiento por covid-19. Su cotización promedio de US$1,800 por onza fue similar a la de 2021. La plata, con un precio promedio de US$21.76 por onza, tuvo un descenso de 13.6%, en comparación con el año anterior, afectada por la debilidad de la inversión y fragilidad de la industria. Por esto último, los precios del plomo y el cobre (US$0.97 y US$3.99 por libra, respectivamente) disminuyeron 2.5% y 5.6%. En contraste, el precio del zinc tuvo un incremento promedio anual de 15.7%, para alcanzar US$1.58 por libra, como resultado de la escasez en la producción del metal afinado por los altos costos de la energía, principalmente en Europa.

Por otra parte, el peso mexicano mostró fortaleza frente al dólar estadounidense. La paridad promedio fue de $20.13 pesos por dólar, lo que significó una apreciación promedio de 0.8% contra el año anterior, mientras que la cotización al cierre de 2022 de $19.36 representa una apreciación de 5.9% al compararse con el precio al cierre de 2021. Influyeron en este resultado el aumento en las exportaciones y el diferencial de tasas de interés, así como el mayor ingreso de remesas que envían los trabajadores mexicanos desde Estados Unidos.

En 2022, continuamos con el plan de contingencia ante las nuevas olas de covid-19, para prevenir contagios entre nuestro personal. Así, reforzamos los protocolos sanitarios y las medidas de protección en todas nuestras operaciones, aplicamos 99,473 pruebas diagnósticas y brindamos asistencia médica y seguimiento a los casos detectados. No obstante, se registraron 12,117 casos positivos, con el lamentable deceso de tres colaboradores a causa de la enfermedad. En las comunidades en las que operamos, hemos hecho donaciones, seguimos difundiendo las medidas preventivas y hemos llevado a cabo campañas de vacunación en coordinación con las autoridades. En el periodo, se aplicaron en nuestras instalaciones más de 347,000 dosis de vacunas a nuestro personal y a terceros.

Durante este periodo, en coordinación con la nueva estructura de Baluarte Minero e impulsado por nuestro Presidente del Consejo de Administración, en Industrias Peñoles continuamos con el proceso de transformación iniciado en 2021. Asimismo, pusimos en marcha una iniciativa de salud financiera para mejorar la eficiencia operativa, reducir y optimizar costos, gastos y la inversión en capital de trabajo, además de racionalizar las inversiones en activos fijos.

A continuación, se presentan los resultados operativos y financieros sobresalientes de 2022. Las cifras financieras están expresadas en millones de dólares, salvo que se indique de otra manera, y las variaciones porcentuales se calcularon en relación con las cifras del ejercicio de 2021.

En 2022, las inversiones en activos fijos sumaron US$748 (1.9% menor a las del año pasado), que se destinaron, principalmente, a (i) la conclusión del proyecto de la mina Juanicipio, de Fresnillo plc; (ii) la continuidad de las operaciones, y (iii) la compra de equipo móvil por las actividades asimiladas, como resultado de la reforma laboral que entró en vigor en 2021.

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En materia de exploración, invertimos US$217, cifra 27.1% mayor a la del ejercicio anterior. Los trabajos se enfocaron en los proyectos de mayor potencial, para optimizar el uso de recursos en línea con el plan de salud financiera, sin afectar el avance de las exploraciones prioritarias. En la unidad Capela, concluyó la campaña de barrenos iniciada a finales de 2020, con lo que se generaron recursos inferidos por 5.4 millones de toneladas de mineral con 4.3% de cobre equivalente, que podrían convertirse en reservas para esta unidad minera. En Reina del Cobre, aledaño a Velardeña, en Durango, continuaron los preparativos para iniciar el desarrollo de obras mineras subterráneas en 2023 y mejorar la confiabilidad de los recursos detectados. En el proyecto de cobre diseminado Fortuna del Cobre, en Sonora, la barrenación paramétrica en el cuerpo descubierto no ha obtenido aún hallazgos favorables para una posible operación minera conforme a los parámetros actuales de la empresa. Por otra parte, en la cartera de proyectos internacionales, mediante las perforaciones en el proyecto de cobre-oro-molibdeno Racaycocha, en Perú, se detectó mineralización adicional de cobre y polimetálica, cuya cuantificación se realizará en 2023. Además, en el proyecto de cobre-oro Yastai, en Chile, una primera estimación de recursos justificó el inicio de una segunda fase de barrenos para ampliar el cuerpo descubierto.

En Fresnillo plc, por su parte, se llevaron a cabo programas de perforación intensiva en las minas operativas con buenos resultados, tanto en la barrenación de relleno como en la conversión de recursos a reservas. Asimismo, se realizaron perforaciones en proyectos tempranos y avanzados en los distritos de Fresnillo, San Julián y Guanajuato. En el ámbito internacional, se iniciaron perforaciones en dos proyectos en Perú y se intensificaron los trabajos en el proyecto Capricornio, en Chile.

En la unidad minera Capela, se han mejorado las recuperaciones metalúrgicas y los grados de los concentrados producidos en la planta de beneficio, ajustando las dosificaciones de reactivos y los parámetros en la molienda. Sin embargo, diversos retos afectaron el ritmo de extracción y beneficio de mineral, como los cambios en la secuencia de minado para fortalecer la seguridad, la disponibilidad limitada de agua y diversos bloqueos de carreteras; todo esto afectó el volumen de mineral procesado, en comparación con 2021. Para mejorar la disponibilidad de agua, se está construyendo una pileta de almacenamiento y se están realizando estudios geohidrológicos para garantizar un abastecimiento sostenible.

En la división minera, el volumen de mineral depositado creció 6.2%, es decir, alcanzó 24.5 millones de toneladas. Esto se logró, principalmente, por la mayor extracción en Herradura y el reinicio de las actividades de extracción en la mina de cobre Milpillas. Con estas operaciones, se compensó la disminución prevista de volumen depositado por Noche Buena, en medida en que esta mina se acerca al fin de su vida útil. El volumen de mineral molido en las plantas de las minas tuvo una ligera disminución (-1.6%), para sumar 21.7 millones de toneladas: las mayores producciones de Fresnillo y Juanicipio -cuyo mineral se procesó en las plantas de beneficio de Saucito y Fresnillo- contrarrestaron la reducción en volúmenes procesados por Saucito, Ciénega, Sabinas y Capela, principalmente.

Asimismo, mayor volumen depositado por Herradura compensó parcialmente la baja en ley del mineral; sin embargo, la tasa de recuperación del oro contenido en patios de lixiviación fue más lenta al procesarse una mayor cantidad de sulfuros. Como resultado, además de la reducción del volumen de mineral con menor ley de Noche Buena, la producción anual de oro de 704,008 onzas fue 13.3% inferior a la de 2021.

La producción minera de plata fue de 67 millones de onzas, con un aumento de 3.9%. Esta mejora fue impulsada, principalmente, por la aportación de mineral de Juanicipio con mejores leyes de cabeza y, en menor medida, por el incremento en el volumen procesado con mejora en leyes y recuperaciones en la mina de Fresnillo, una vez que se superaron las restricciones operativas que afectaron la producción durante 2021. Estas minas compensaron la disminución de plata producida por (i) San Julián (proveniente del cuerpo diseminado), debido a una reducción esperada en la ley de cabeza; (ii) Ciénega, Sabinas y Capela, con menores volúmenes procesados y leyes inferiores, además de menor recuperación en esta última, y (iii) menor molienda de mineral en Saucito, cuyo efecto se contrarrestó parcialmente con mejor ley.

En la producción minera de metales industriales, el volumen de plomo contenido de 78,241 toneladas fue similar al del año anterior (-0.7%), gracias al mayor procesamiento de mineral de Fresnillo y Juanicipio con mejores leyes, así como por las mejores leyes y recuperaciones obtenidas por Sabinas, Velardeña y Tizapa. Todas ellas compensaron la baja producción de Saucito, debido a la reducción del volumen beneficiado con menor ley, y de San Julián, por menor ley. El volumen de zinc tuvo, asimismo, una ligera reducción (de 1.7%) al registrar 269,262 toneladas, que también se vio afectado por el descenso de mineral beneficiado en Saucito y menor ley de cabeza. Esto último sucedió también en Velardeña y San Julián. Tales déficits se suplieron parcialmente con las producciones de Fresnillo y Juanicipio, ambas con mayor volumen de mineral procesado y mejor ley de cabeza.

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La producción de cobre en concentrados disminuyó 12.1%, como resultado del menor beneficio de mineral con menor ley y recuperación en Sabinas, menor ley y recuperación en Velardeña, así como menor volumen procesado por Tizapa. Lo anterior fue compensado por Capela, que presentó una mejora en ley de cabeza y en su recuperación metalúrgica. Por el contrario, el cobre producido en cátodos aumentó 80.4%, ya que las buenas perspectivas para el precio del cobre motivaron el reinicio en las actividades de Milpillas. Como se informó anteriormente, las operaciones de esta unidad minera se habían suspendido en 2020 por la abrupta caída en el precio del metal rojo, además de los altos costos de operación y las bajas leyes.

Por otra parte, gestionamos los depósitos de jales de forma integral con base en estándares internacionales. Actualmente, contamos con una sólida estructura de gobernanza y de gestión, integrada por un panel de expertos independientes, un Comité Ejecutivo de Jales y comités operativos de jales en cada unidad operativa, entre otros. Nuestro objetivo es aplicar tecnologías, controles, prácticas y métodos en todas nuestras instalaciones de jales para un manejo seguro y responsable de los residuos minerales, a fin de no causar daños en las comunidades vecinas y en el medio ambiente. En este año, se registraron avances sustanciales en las operaciones mineras para cumplir con las recomendaciones del panel. Asimismo, Tizapa avanzó en la instalación de un tanque espesador de colas para elevar la recuperación de agua de proceso, que espera ponerse en marcha el primer semestre de 2023.

Asimismo, continúa el despliegue de tecnología en línea con nuestra visión de Mina Inteligente, para automatizar y optimizar los procesos operativos e incrementar la productividad y la seguridad de nuestro personal. En este periodo, se avanzó en la instalación del sistema de voladura remota, se fortaleció el sistema de información de mina y se inició el control avanzado de molienda en la planta de beneficio de Capela. También se extendió la instalación de sensores de somnolencia y fatiga en los equipos de transporte, se inició un programa piloto de aviso anticolisión en Velardeña y en Sabinas; así como la instalación de un sistema de ventilación bajo demanda en San Julián.

Al final del ejercicio, se realizó la interconexión a la red eléctrica del proyecto de mina Juanicipio, en Zacatecas (en copropiedad de Fresnillo plc -con 56% - y MAG Silver Corp -con44%-), que contó con una inversión total de US$440, una vez que se cumplieron todos los requisitos técnicos solicitados por la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y que las pruebas fueron exitosas. Así, se inició formalmente la puesta en marcha de esta unidad minera; se espera que su producción promedio anual sea de 11.7 millones de onzas de plata y de 43,500 onzas de oro. Por su parte, la planta de flotación de jales en la mina Fresnillo para recuperar contenidos de plata y oro (Piritas fase II), que complementa a la fase I en Saucito, sigue esperando su interconexión a la red eléctrica para iniciar operaciones.

En las operaciones metalúrgicas, los volúmenes de concentrados y otros materiales procesados dentro del circuito plomo-plata disminuyeron en comparación con el año anterior. El principal reto en la fundición fue lograr un balance adecuado de las mixturas a tratar, debido a las bajas leyes de plomo en los concentrados recibidos y la alta presencia de cobre, además de que la calidad en los cementos plomo-plata de la planta de zinc fue variable. Esto ocasionó paros correctivos en hornos y fallas en la etapa de sinterizado, lo que afectó la producción de bullion y su ingreso a la refinería de plomo-plata, en donde también se recibieron menos dorés de Herradura y Noche Buena, así como precipitados provenientes de Ciénega. En consecuencia, las producciones en este circuito fueron inferiores en comparación con 2021: el oro en 9.4% -con 1,013,151 onzas-, la plata en 1.9% -con 73.8 millones de onzas-, mientras que el plomo refinado -con 109,060 toneladas-, tuvo un descenso de 9.4%.

En el circuito de zinc, continuó la normalización de las operaciones. Se superaron las dificultades en los procesos de tostación y de balanceo en la interacción de las plantas de tostación-ácido (antigua) y lixiviación directa (nueva). Asimismo, las recuperaciones de zinc en concentrados y de plata en los cementos plomo-plata se acercaron a los niveles de diseño, con 93% y 83%, respectivamente. El principal reto persiste en el área de electrólisis, donde se lleva a cabo el reemplazo de ánodos dañados por los paros no programados durante 2021 y 2022; se estima que podrá concluirse en el primer trimestre de 2023, pues se ha retrasado su recepción. Esto permitirá mejorar la eficiencia en el uso de corriente eléctrica, reducir el consumo de electricidad por tonelada producida e incrementar gradualmente la producción para alcanzar la capacidad instalada de 350,000 toneladas anuales de producción de zinc refinado hacia 2024. Además, para cuidar la calidad y la pureza del zinc afinado, el volumen de concentrados tratados disminuyó en comparación con el ejercicio de 2021, y con ello la producción anual de zinc refinado tuvo un descenso de 10.3% al registrar 237,127 toneladas. Con respecto al proceso de recuperación de plata, se produjeron 5 millones de onzas de plata contenida en cementos; sin embargo, este volumen no pudo ser totalmente tratado en la fundición. Seguimos analizando alternativas para mejorar la calidad de los cementos, con el fin de procesarlos oportunamente en la fundición sin afectar el proceso de sinterizado.

Los productos químicos inorgánicos tuvieron un buen desempeño en el periodo. Destaca el óxido de magnesio, con una producción de 87,822 toneladas (15.1% superior a la obtenida en 2021), gracias a la alta demanda en nuestros principales mercados de Norteamérica y Europa -aunque esta se moderó en el segundo semestre debido a la desaceleración económica-. Asimismo, para cumplir con las necesidades de nuestros clientes, se implementaron

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algunas estrategias operativas, como la optimización de los programas de mantenimiento preventivo y de eficiencia en hornos. El sulfato de sodio registró un volumen de 764,089 toneladas, similar (+0.3%) al de 2021. Por su parte, el sulfato de magnesio nuevamente rompió la marca anual de producción con 66,497 toneladas, gracias al buen desempeño del sector agrícola nacional. Además, obtuvimos el registro del Instituto de Revisión de Materiales Orgánicos (OMRI), lo que mejora la competitividad de nuestro producto en el nicho de los cultivos orgánicos.

En materia de energía, 2022 planteó nuevos retos. A los cambios en la política energética nacional, se sumaron los altos precios de los combustibles, del gas natural y del coque de petróleo, debido al conflicto geopolítico en Ucrania. Aun cuando el entorno ha sido adverso, reafirmamos las metas planteadas en nuestra estrategia, a saber: asegurar el suministro continuo de energía eléctrica para nuestras operaciones a costo competitivo y hacer un uso eficiente de los energéticos. Asimismo, motivados por nuestro firme compromiso con la sostenibilidad y la protección al medio ambiente, avanzamos en la preparación de una hoja de ruta para la descarbonización de las operaciones. Por ello, nos mantenemos atentos a las oportunidades que ofrecen las tecnologías verdes emergentes, como el hidrógeno y el amoniaco libre de emisiones, no solo para el abastecimiento de electricidad, sino también para la potencial sustitución de combustibles en vehículos y equipos productivos.

Por otro lado, nuestro portafolio de centrales eléctricas suministró el 83.5% del consumo requerido por las operaciones, cuya demanda de electricidad tuvo un incremento marginal (+0.6%) sobre la de 2021. Continúan las gestiones con las autoridades para migrar algunas cargas al Mercado Eléctrico Mayorista (MEM), por lo que gran parte de la energía generada por Eólica Mesa la Paz se le vendió al operador de mercado y solo pudo asignarse el 11.5% a la unidad Capela; el resto de nuestro consumo (16.5%) lo compramos a la CFE. La generación de electricidad de las fuentes renovables en relación con nuestro consumo aumentó de 47.8% en 2021 a 49.0% en 2022.

El costo unitario de la electricidad consumida fue 10.7% superior al del año pasado (US¢ 8.71 por kWh), por los siguientes factores: (i) el aumento de la tarifa de CFE; (ii) la mayor participación de Eólica de Coahuila en el suministro para consumir el inventario de energía, lo que implicó mayor costo de transmisión; (iii) un incremento sustancial, a partir de octubre, en el costo del coque que utiliza la Termoeléctrica Peñoles (TEP), al concluir el contrato de suministro a precio fijo que tenía desde su origen; (iv) la inflación de los costos originados en pesos (como el flete de coque y los gastos de operación y mantenimiento de TEP), y (v) la reducción del tipo de cambio promedio del peso frente al dólar, lo que encareció los costos incurridos en pesos en términos de dólares.

Los resultados financieros del ejercicio, expresados en millones de dólares, fueron los siguientes:

Las ventas -sin incluir resultados por cobertura- disminuyeron 8.5% a US$5,527, debido a la reducción de los volúmenes vendidos, sobre todo de oro y zinc, y el menor precio de la plata. Las operaciones de cobertura de precios de los metales y tipos de cambio, que reducen el riesgo de fluctuaciones importantes y disminuyen la volatilidad de la UAFIDA, generaron un costo de oportunidad de US$3, favorable en comparación con el costo de US$71 incurrido en 2021. Así, las ventas netas fueron US$5,523, con un decremento de 7.5%.

El costo de ventas aumentó 1.7% al registrar US$4,491, como resultado de mayores costos de producción por distintas razones: (i) la inflación en nuestra canasta de insumos para las operaciones; (ii) los trabajos de reforzamiento en los depósitos de jales, de desarrollo y preparación en las minas; (iii) las reparaciones realizadas, y (iv) en menor medida, los costos asociados al reinicio de actividades de extracción en la mina de Milpillas. A lo anterior se sumó el efecto adverso de la apreciación del peso frente al dólar sobre los costos incurridos en pesos (que representan aproximadamente el 50% de los costos de producción). Debido a la reducción de volúmenes de concentrados y otros materiales comprados a remitentes para las operaciones metalúrgicas, además del menor precio de la plata y del plomo, se redujo el costo del metal, lo cual se compensó parcialmente por la reducción de los ingresos por tratamiento, como resultado de este menor volumen adquirido.

De esta manera, la utilidad bruta fue de US$1,032 -33.6% por debajo de la obtenida en 2021-, en tanto que los gastos generales por US$652 se incrementaron 11.5%, sobre todo en exploración y gastos de mercado. Con lo anterior, la UAFIDA fue de US$1,071 y el resultado de operación de US$380, menores en 36.9% y 60.8%, respectivamente, al compararse con las cifras del año pasado. Por su parte, los gastos financieros netos ascendieron 3.6% a US$158, debido, principalmente, a las altas tasas de interés que afectan los créditos a corto plazo y reservas de cierre, así como por actualizaciones de impuestos, lo que se mitigó con mayores intereses obtenidos sobre las inversiones realizadas. Asimismo, en contraste con los otros ingresos netos de US$11 obtenidos durante 2021, en el periodo se registraron otros gastos netos de US$1. Esto se debió, principalmente, a: (i) la pérdida en venta de concentrados, (ii) el castigo a la ingeniería para una nueva tecnología de fundición de plomo, y (iii) el mayor gasto de remediación en las unidades mineras cerradas. Lo anterior se compensó con el ingreso por otorgar el derecho a un tercero para expandir su tajo en concesiones de la Compañía, así como por reversión en el deterioro de activos de la mina Madero.

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