Morgan, que ahora trabaja para News Corp y a menudo ha criticado públicamente a Harry y a su esposa estadounidense Meghan, siempre ha negado cualquier implicación o conocimiento del pirateo telefónico u otra actividad ilegal o ilícita.

El juez Timothy Fancourt dictaminó el viernes que Harry había sido víctima de pirateo telefónico y otros comportamientos ilegales por parte de periodistas de Mirror Group Newspapers, y dijo que los editores habían sido conscientes de lo que estaba ocurriendo.

Omid Scobie, coautor de "Finding Freedom" (Encontrando la libertad), una biografía no oficial de 2020 de Harry y Meghan, había declarado que Morgan estaba "tranquilo" sobre una historia de 2002 sobre la cantante Kylie Minogue y su entonces pareja James Gooding después de que le dijeran que procedía de la interceptación de un buzón de voz.

Mirror Group Newspapers (MGN), el editor del Daily Mirror, Sunday Mirror y Sunday People, cuestionó a Scobie sobre sus motivos para prestar declaración en apoyo del caso de Harry.

Pero Fancourt dijo en su fallo escrito del viernes que Scobie era "un testigo directo y fiable".

"Acepto lo que dijo sobre la implicación del señor Morgan en la historia Minogue/Gooding", añadió el juez. "Ninguna prueba fue llamada por MGN para contradecirlo".

Morgan declinó hacer comentarios sobre las conclusiones del juez.

Fancourt también dijo en su sentencia que hay "pruebas convincentes de que los editores de cada periódico sabían muy bien que (la interceptación del buzón de voz) se utilizaba de forma extensiva y habitual y que estaban encantados de beneficiarse de ello".

El juez dijo que los editores también estaban contentos de tomar los beneficios de la recopilación ilegal de información "conectada y relacionada" por parte de los periodistas e investigadores privados de MGN.

También se descubrió que Sly Bailey -jefe ejecutivo de la entonces empresa matriz de MGN, Trinity Mirror, ahora conocida como Reach, entre 2003 y 2012- conocía el uso habitual del pirateo telefónico y otras formas de recopilación ilegal de información.

Bailey declaró en mayo que "no tenía conocimiento de estas actividades" y que las revelaciones de actos ilícitos eran "motivo de gran pesar".

Sin embargo, Fancourt determinó que Bailey y Paul Vickers, director jurídico del grupo Trinity Mirror hasta 2014, "conocían -o, lo que es lo mismo, hicieron la vista gorda ante- la amplia y habitual" recopilación ilegal de información en MGN.

Tras la sentencia, Harry pidió a los reguladores y a la policía que investigaran posibles delitos penales.