Un tribunal de apelaciones de EE.UU. revivió el lunes una demanda antimonopolio de Regeneron Pharmaceuticals contra Novartis relacionada con tratamientos recetados para tratar una enfermedad que puede provocar trastornos oculares, incluida la ceguera permanente.

El Tribunal de Apelaciones del 2º Circuito de EE.UU. en Manhattan dijo que un juez de un tribunal inferior se equivocó al desestimar el caso, en parte por haber aplicado un criterio jurídico inadecuado a las reclamaciones de Regeneron.

En un comunicado, Regeneron dijo que se sentía "alentada por la decisión del 2º Circuito" y que esperaba "seguir avanzando en nuestra posición en futuros procedimientos."

Novartis no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios.

Regeneron, con sede en Tarrytown, Nueva York, demandó a Novartis, con sede en Basilea, Suiza, en 2020. Alegó que Novartis conspiró con la codemandada Vetter Pharma para retrasar el lanzamiento por parte de Regeneron de una versión de su medicamento oftalmológico.

Novartis demandó anteriormente a Regeneron por supuesta infracción de patentes sobre los mismos tratamientos oculares, que combaten la sobreproducción de una proteína que puede causar trastornos oculares.

Regeneron dijo el lunes que Novartis está "haciendo valer ilegalmente una patente inválida e inaplicable" en ese caso, que está en curso.

Regeneron fabrica el medicamento Eylea, y Novartis produce su rival Lucentis. Según los registros judiciales, Regeneron y Vetter firmaron un acuerdo de colaboración en 2005 para producir una versión de jeringa precargada de Eylea, que originalmente se envasaba en viales.

La demanda de Regeneron alegaba que Vetter llegó a un acuerdo similar con Novartis en 2009 para desarrollar una versión de Lucentis en jeringuilla precargada, y que las empresas conspiraron para restringir la competencia.

Un juez federal de Nueva York dictaminó en 2022 que Regeneron no había establecido la existencia de un mercado de productos relevante para sus demandas antimonopolio. El tribunal de apelaciones discrepó el lunes y dijo que el caso de Regeneron podía seguir adelante. (Reportaje de Jonathan Stempel en Nueva York y Mike Scarcella en Washington Edición de David Bario y Deepa Babington)