En un comunicado, Avtovaz dijo que veía cómo el mercado automovilístico ruso se contraía un 59%, hasta los 676.000 coches nuevos vendidos en 2022, mientras que sus propias ventas descendían un 46%, hasta los 188.645 coches.

El sector automovilístico ruso se ha visto sacudido por las sanciones sin precedentes impuestas por los países occidentales después de que Moscú ordenara la entrada de decenas de miles de tropas en Ucrania el pasado mes de febrero.

Marcas occidentales como Renault y Volkswagen se han retirado de Rusia, mientras que competidores chinos e iraníes han anunciado planes para entrar en el mercado ruso.

Avtovaz, el mayor fabricante de automóviles del país, despidió a los trabajadores de sus plantas de Izhevsk y Togliatti al romperse las cadenas de suministro. Desde entonces ha relanzado la producción de algunas marcas de Ladas, desprovistas de ciertas características que dependen de componentes importados.