MÚNICH (dpa-AFX) - A pesar de la continua debilidad de la demanda de los fabricantes de chips, el fabricante de obleas Siltronic se muestra algo más confiado de cara a 2023 gracias a la estabilidad de los precios de venta. Aunque la demanda sigue sufriendo las continuas reducciones de existencias de los clientes y aún no se vislumbra un cambio de tendencia, el consejero delegado del Grupo, Michael Heckmeier, declaró el jueves en una conferencia telefónica con analistas para presentar las cifras del tercer trimestre. No obstante, la facturación del último trimestre debería ser superior a la del tercero.

En el pasado tercer trimestre, la facturación cayó un buen 26%, hasta unos 349 millones de euros, en comparación con el mismo periodo del año anterior. El beneficio antes de intereses, impuestos, depreciaciones y amortizaciones (Ebitda) se desplomó un 42%, hasta unos buenos 99 millones de euros. Los analistas esperaban cifras aún más bajas. Por debajo de la línea, la participación de Wacker Chemie ganó 35,1 millones de euros, frente a los cerca de 110 millones de hace un año.

Para el ejercicio completo, Heckmeier espera ahora que las ventas del Grupo se sitúen entre un 15% y un 17% por debajo del nivel récord del año pasado, de 1.800 millones de euros. La previsión coincide así con la estimación media de los analistas. Para el conjunto del año, entre el 28 y el 30 por ciento de la facturación debería quedar como beneficio antes de intereses, impuestos, depreciaciones y amortizaciones (Ebitda). Anteriormente, el límite inferior de la horquilla era del 26%.

Esto fue bien recibido en bolsa, y las acciones subieron un cinco y medio por ciento a primera hora de la tarde en la parte alta del índice de pequeña capitalización SDax. Tras el revés de las dos últimas semanas, la situación se ha animado un poco.

El sector de los chips lleva meses sufriendo las consecuencias de la reticencia de consumidores y empresas a comprar smartphones, ordenadores y otros aparatos electrónicos. Además, muchos fabricantes de chips y sus clientes habían estado haciendo acopio de todo lo que podían conseguir en tiempos de problemas en la cadena de suministro durante la pandemia de Corona. Siguen agotando estas existencias antes de hacer pedidos a gran escala.

Los fabricantes de chips de memoria, como Samsung y SK Hynix, también están sufriendo esta caída. Este último comunicó el jueves unas pérdidas en el tercer trimestre superiores a lo que temían los analistas. Al mismo tiempo, sin embargo, la presión sobre los beneficios disminuyó un poco. Con vistas a una esperada recuperación del mercado de chips de memoria, los surcoreanos dieron así señales contradictorias. Las acciones también sufrieron presiones.

Las cosas parecían ir mejor para las acciones de la empresa de chips STMicroelectronics, que se recuperaron un buen tres por ciento en la bolsa multinacional Euronext de su reciente débil racha. Aunque la demanda de los fabricantes de electrónica de consumo sigue siendo floja, el negocio con la industria del automóvil fue bueno. El grupo superó las expectativas de ventas de los analistas para el tercer trimestre.

Las fuertes fluctuaciones del negocio no son inusuales en el sector de los chips. Por eso, Heckmeier, CEO de Siltronic, se muestra confiado. "Impulsada por las megatendencias de la inteligencia artificial, la digitalización y la electromovilidad, Siltronic se prepara para la próxima fase de crecimiento", afirma la empresa.

Por este motivo, Siltronic lleva tiempo invirtiendo mucho dinero en una nueva planta en Singapur; además, el centro de producción de Freiberg (Sajonia) se amplió con otra sala de estirado para cristales de silicio. Con estos cristales se fabrican obleas de silicio hiperpuro que los clientes de Siltronic pueden transformar en chips electrónicos./mis/men/jha/