El grupo estadounidense nació en 1993 del deseo de su fundador, W. Kent Taylor, de crear un restaurante temático "Colorado". Nació en Clarksville, Indiana. Treinta años después, el grupo posee una cadena de restaurantes homónima especializada en cocina tejana, con presencia en 49 estados norteamericanos y diez países extranjeros. La cocina tejana es sinónimo de carne: chuletón de buey, pollo frito, pulled pork, etc. Aunque a muchos les preocupe el futuro éxito de una cadena de restaurantes cuyo concepto se basa principalmente en la carne, nos parece que Texas y Florida, las principales sedes del grupo, serán seguramente de las últimas regiones del mundo en ceder a la retórica de la moderación en el consumo de proteínas animales...

Más recientemente, el grupo ha desarrollado las cadenas Bubba's 33 y Jaggers, que se centran más en la comida rápida -hamburguesas, pizza y alitas de pollo, etc. En resumen, los conceptos siguen siendo muy básicos -carne y comida americana-, pero eso no ha impedido a Texas Roadhouse Inc ser un éxito en bolsa y en los cines.

Una flota de 652 restaurantes

A 16 de febrero de 2023, la cadena explotaba, bajo su propio nombre o a través de un sistema de franquicia, unos 652 restaurantes Texas Roadhouse, 40 Bubba's 33 y 5 Jaggers. Más recientemente, el grupo ha seguido una política de compra de sus franquicias. Esta es una de las razones del estancamiento de los ingresos en esta rúbrica, pero volveremos sobre ello más adelante. Como complemento de su mercado nacional, Texas Roadhouse ha invertido a escala internacional y cuenta actualmente con unos cuarenta restaurantes.

Márgenes (muy) inferiores a los líderes del sector

a ralentizarse. Las ventas han pasado de 1.423 millones USD en 2013 a 4.015 millones USD en 2022. Los márgenes operativos están estancados en torno al 9%, aunque con muy poca volatilidad. Aunque estos márgenes son razonables, deben considerarse en el contexto del sector en su conjunto. McDonald's opera en torno al 40%, Domino's Pizza al 17% y Restaurants Brands International al 35%. Esta diferencia se debe principalmente a la naturaleza del modelo de negocio de Texas Roadhouse. Alrededor de tres cuartas partes de los locales de la cadena son alquilados. Además, al tratarse más de una brasserie que de un restaurante de comida rápida, los costes de personal son mucho más elevados -alrededor del 35% de la facturación frente al 10% de McDonald's-, lo que, unido al coste de las materias primas -también el 35% de la facturación frente al 10% de McDonald's-, significa que los márgenes son considerablemente inferiores.

Los márgenes de flujo de caja libre "free cash flow" coquetean con el 5%, también muy por debajo de la media del sector.
 
La estructura de la base de costes de Texas Roadhouse hace que el grupo sea muy sensible a la inflación, que lleva varios trimestres haciendo estragos. La inflación de los productos básicos y los salarios alcanzó el 7,4% en el año. Como todas las empresas, por supuesto, pero no todas gastan el 34% y el 33% de sus ventas respectivamente en salarios y compras de alimentos y bebidas.

Fuente: MarketScreener

Un balance bastante robusto

Si echamos un vistazo rápido al balance, el grupo tiene unos fondos propios de 1.082 millones de dólares y una deuda, consistente únicamente en arrendamientos operativos, de unos 712 millones de dólares. En otras palabras, no hay problemas de endeudamiento en el horizonte.
 
También significa que las adquisiciones se pagan al contado. Una política de adquisiciones posible gracias a los 107 millones de dólares de activos líquidos. Aunque esta cantidad ha disminuido como consecuencia de importantes recompras de acciones y de la amortización de líneas de crédito renovables, puede volver a aumentar rápidamente dado el importante flujo de caja libre generado por la empresa.
 
Para los entendidos, desde 2009 -con la excepción de 2020- la rentabilidad del capital invertido por el grupo ha sido sistemáticamente superior a la exigida por los prestamistas, con una media en torno al 3,5% en los últimos 14 años -incluido 2020-. En otras palabras, el dinero está siendo hábilmente invertido/utilizado por la dirección.

Diez años muy favorables para los accionistas

En los seis primeros meses de 2023, se abrieron 10 restaurantes y se adquirieron 11 franquicias. Estas cifras están por debajo de las expectativas, dado que a finales del año pasado la dirección había anunciado objetivos anuales de 30 aperturas de restaurantes Texas Roadhouse y Bubba's 33 en 12 meses.
 
En los últimos 10 años, el flujo de caja operativo ha ascendido a 3.223 millones de dólares. De esta cantidad, aproximadamente el 50% se destina a gastos de capital, el 20% a distribución de dividendos y el 15% a recompra de acciones. Texas Roadhouse sigue, por tanto, una importante política de retorno al accionista, que se refleja también en un dividendo que no ha dejado de aumentar desde 2011, año del primer pago de dividendos del Grupo. Esto no incluye el año post-pandémico de 2020, cuando el dividendo se redujo de 1,20 a 0,36 dólares por acción. Al mismo tiempo, el precio de la acción ha subido mucho. Para mantenernos en la misma escala temporal, el precio de la acción ha ganado un 353%, lo que representa un incremento anual de alrededor del 13,44%.

Conclusión

En conclusión, el grupo americano es estructuralmente menos rentable que sus rivales de comida rápida, con los que a menudo se le compara erróneamente. Sin embargo, su rentabilidad es excepcional en términos de relación entre beneficios y capital invertido, y ello en un periodo muy favorable. El desarrollo de los restaurantes Jaggers, y en menor medida de Bubba's 33, debería impulsar la rentabilidad media del grupo. ¿Será suficiente para que la cotización siga subiendo en el Nasdaq 400 Composite?

Clasificaciónes Surperformance de Texas Roadhouse, Inc