El BCE ha subido los tipos en un total de 4 puntos porcentuales en el último año y prometió otra medida en julio, ya que podría tardar hasta 2025 en conseguir que el crecimiento de los precios vuelva al 2%.
"Para mí, la inflación es como una bestia codiciosa y tenemos que luchar contra esta bestia tan codiciosa", dijo el jefe del Bundesbank, Joachim Nagel, en una conferencia. "Como luchadores contra la inflación tenemos que ser muy testarudos porque la inflación es muy testaruda".
Nagel argumentó en el pasado que las subidas de tipos podrían no haber terminado antes de las "vacaciones de verano", una insinuación de que podría estar sobre la mesa otra subida en septiembre.
Por su parte, Isabel Schnabel, miembro del consejo del BCE, argumentó que existía el riesgo de que el crecimiento de los salarios alimentara el crecimiento de los precios, desencadenando una espiral salarios-precios difícil de romper.
"El mercado laboral es increíblemente fuerte", declaró en el mismo acto Schnabel, responsable de las operaciones de mercado del BCE. "La proporción entre vacantes y parados está en máximos históricos. Esto, por supuesto, eleva el poder de negociación de los trabajadores".
Sostuvo que unos márgenes de beneficios saludables absorberían la mayor parte de la presión salarial este año, pero no era seguro que las empresas no repercutieran unos salarios más altos a los consumidores.
"Creo que existe el riesgo de que esto se convierta en una espiral de precios salariales", afirmó. "Y por eso tenemos que estar muy atentos y vigilar esto muy de cerca".
Los mercados han descontado totalmente una subida de tipos en julio, dado el compromiso de facto del BCE, y también han descontado otro movimiento antes de que se considere que los tipos alcanzarán un máximo del 4% este año.
"Sería un error de primer orden rendirse demasiado pronto", dijo Nagel". (Reportaje de Balazs Koranyi Edición de Alison Williams y Mark Potter)
