FRÁNCFORT (Reuters) - Los supervisores del Banco Central Europeo (BCE) suelen ser demasiado indulgentes con los bancos a la hora de gestionar el riesgo de crédito, especialmente en el caso de los que obtienen peores resultados, afirmó el viernes el Tribunal de Cuentas Europeo en un informe en el que pone de relieve una serie de deficiencias.

El BCE supervisa algo más de un centenar de los mayores bancos de la eurozona y lleva tiempo quejándose de que los bancos no se toman en serio el riesgo de la deuda acumulada, al no reconocer los problemas, ni dotar provisiones.

Pero el informe del viernes del auditor externo de la Unión Europea sugiere que el problema es más sistémico que una falta de cumplimiento por parte de los bancos.

El informe concluye que el BCE aplica sus normas de forma incoherente, se muestra indulgente con los bancos de mayor riesgo, tarda demasiado en tomar decisiones sobre el capital y no siempre cuenta con el personal de supervisión adecuado.

"El BCE no impuso requisitos (de capital) proporcionalmente más elevados cuando los bancos afrontaban mayores riesgos, lo que significa que los riesgos no están claramente vinculados al requisito impuesto", señaló el TCE.

"Para los bancos de mayor riesgo, seleccionó sistemáticamente requisitos situados en la parte inferior de los intervalos predefinidos", señaló el informe, que añadió que observó un patrón en el que el BCE no intensificaba suficientemente las medidas de supervisión cuando el riesgo de crédito era elevado y sostenido.

El resultado de esta práctica es que un banco de menor riesgo podría tener en realidad mayores requisitos de capital que un banco de mayor riesgo, según el TCE.

El informe es el primero desde que el BCE acordó en 2019 compartir datos sensibles específicos de los bancos con fines de auditoría, pero sus recomendaciones no son vinculantes.

Respondiendo en el anexo del informe, el BCE defendió en su mayoría sus prácticas, pero reconoció algunos problemas.

"El BCE considera que su metodología actual para determinar los requisitos adicionales de capital garantiza que todos los riesgos importantes a los que está expuesta una entidad están adecuadamente cubiertos".

Los préstamos morosos llevan años disminuyendo de forma constante y se sitúan cerca de su mínimo histórico, en parte debido a la agresiva campaña del BCE para liberar al sector bancario de una carga histórica.

Aun así, el informe añade que la metodología que el BCE ha utilizado desde 2021 para determinar los requisitos adicionales de capital no ofrece garantías de que los distintos riesgos individuales de los bancos estén adecuadamente cubiertos.

Según el informe, el BCE también tarda demasiado en adoptar sus decisiones definitivas sobre los requisitos de capital, por lo que los riesgos no siempre se gestionan a tiempo.

Según el informe, el BCE ha decidido no aumentar su plantilla a partir de 2023 y nueve de los 22 supervisores nacionales carecen de personal suficiente para formar equipos conjuntos de supervisión.

(Información de Balazs Koranyi; editado en español por Benjamín Mejías Valencia)