La tasa de paro de la nación sudamericana subió al 7,7% en el primer trimestre, frente al 6,9% del periodo del año anterior.
Mientras tanto, se confirmó una recesión técnica largamente sospechada, ya que el producto interior bruto (PIB) de Argentina se contrajo un 2,6% intertrimestral.
En términos interanuales, la economía cayó un 5,1%, superando ligeramente la previsión de los analistas de una contracción del 5,25%.
El consumo privado retrocedió un 6,7% anual en el trimestre, mientras que el consumo público cayó un 5%, según los datos. Las importaciones también se hundieron un 20,1%, pero las exportaciones subieron un 26,1%.