La medida formaba parte de la undécima fase de una operación que investiga a personas implicadas en los disturbios, en los que partidarios del ex presidente Jair Bolsonaro invadieron y saquearon el Congreso, el palacio presidencial y el Tribunal Supremo. El presidente Luiz Inácio Lula da Silva había asumido el cargo a principios de mes tras derrotar a Bolsonaro en las elecciones de octubre.

La policía dijo en un comunicado que estaba cumpliendo 22 órdenes de registro e incautación ordenadas por el Tribunal Supremo en tres estados, con bienes y activos pertenecientes a los objetivos aún sin nombre congelados o incautados.

La operación se puso en marcha a mediados de enero para identificar a las personas que participaron en los disturbios, los financiaron o los fomentaron, y hasta ahora se han llevado a cabo docenas de redadas.

La policía federal reiteró que los objetivos estaban siendo investigados por delitos de "abolición violenta del Estado de derecho, golpe de Estado, daños cualificados, asociación criminal, incitación, destrucción y deterioro de bienes especialmente protegidos".

(1$ = 5,0033 reales)