El embajador de Argelia ante la ONU, Amar Bendjama, declaró el martes -tras una reunión a puerta cerrada del órgano de seguridad de la ONU de 15 miembros sobre Gaza- que el objetivo de la medida era "detener la matanza en Rafah". Argelia es miembro del Consejo para 2024/25.
El borrador del texto argelino, visto por Reuters, utiliza el lenguaje más enérgico del Consejo de Seguridad: "decide que Israel, la potencia ocupante, detenga inmediatamente su ofensiva militar y cualquier otra acción en Rafah".
También cita un fallo de la Corte Internacional de Justicia de la semana pasada que ordenó a Israel detener inmediatamente su asalto militar en Rafah, en un fallo de emergencia histórico en el caso de Sudáfrica que acusa a Israel de genocidio.
Los diplomáticos dijeron que el consejo podría votar en cuestión de días.
La medida se produce después de que el domingo un ataque provocara un incendio en un campamento en una zona humanitaria designada de Rafah, en el sur de Gaza, matando al menos a 45 personas. Israel dijo que había atacado a militantes de Hamás y que no había pretendido dañar a civiles.
Una resolución del Consejo necesita al menos nueve votos a favor y ningún veto de EE.UU., Gran Bretaña, Francia, Rusia o China para ser aprobada. Hasta ahora, Estados Unidos ha protegido a su aliado Israel vetando tres proyectos de resolución del consejo sobre la guerra en Gaza.
Pero Washington también se ha abstenido en tres votaciones, la última de las cuales permitió que el consejo exigiera en marzo un alto el fuego inmediato entre Israel y los militantes palestinos de Hamás.
Israel está tomando represalias contra Hamás, que gobierna Gaza, por un ataque perpetrado por sus militantes el 7 de octubre en el que murieron más de 1.200 personas y más de 250 fueron tomadas como rehenes, según los recuentos israelíes. Se cree que casi 130 rehenes permanecen cautivos en Gaza.
Israel lanzó un asalto aéreo, terrestre y marítimo contra el territorio palestino bloqueado en el que murieron más de 36.000 palestinos, según las autoridades sanitarias de Gaza. Israel afirma que quiere acabar con las últimas grandes formaciones intactas de combatientes de Hamás atrincherados en Rafah y rescatar a los rehenes.
