Horas después de ser rescatada de un cautiverio de ocho meses en Gaza, la rehén liberada Noa Argamani llegó a un hospital de Tel Aviv para ver a su madre, enferma terminal.

Argamani, de 26 años, era uno de los rostros más reconocidos entre los rehenes secuestrados por Hamás el 7 de octubre. Las estremecedoras imágenes de su traslado a Gaza a lomos de una motocicleta, suplicando por su vida y tendiendo desesperadamente la mano a su novio que marchaba junto a ella a pie circularon por todo el mundo.

El novio de Argamani, Avinatan Or, sigue en cautividad.

Argamani fue rescatada el sábado, junto con otros tres rehenes, en una operación de las fuerzas especiales israelíes en un edificio de apartamentos del centro de Gaza.

"Estoy tan feliz de estar aquí", dijo en una llamada telefónica con el presidente de Israel a su regreso, sonriente y rodeada de amigos y familiares.

Más tarde fue recibida con vítores a su llegada al Centro Médico Sourasky de Tel Aviv, donde su madre, Liora, estaba siendo tratada de un cáncer cerebral terminal.

En octubre, poco después de que su hija fuera secuestrada en un festival de música convertido en campo de exterminio en el sur de Israel, a Liora, sentada en una silla de ruedas, le preguntaron en una entrevista con una cadena de televisión local cómo se imaginaba su reencuentro.

"Al menos poder abrazarla", respondió Liora.

El director general del hospital, Ronni Gamzu, dijo que el estado de la madre era "complicado y duro". Dijo que Argamani pudo

comunicarse con su madre, que creen que comprendió que su hija había vuelto a casa.

"Durante los últimos ocho meses estamos intentando mantenerla en un estado en el que pueda comunicarse", dijo Gamzu.

El padre de Argamani, Yaakov, la conoció por primera vez después de que un helicóptero militar la transportara de vuelta a Israel.

"Hoy es mi cumpleaños, y un regalo como éste nunca creí que lo recibiría", dijo.

Más de 360 personas murieron durante el asalto al festival de danza Nova, y otras 40 fueron tomadas como rehenes por Hamás, según los recuentos israelíes.

Cerca del hospital, en el centro de Tel Aviv, en lo que se ha dado en llamar la plaza de los rehenes, miles de israelíes se concentraron para conmemorar el rescate de los cuatro rehenes y exigir la liberación de los más de 115 que permanecen en Gaza.