El embajador Matti Maasikas acogió con satisfacción el esperado nombramiento esta semana de ocho nuevos miembros del Consejo Superior de Justicia de Ucrania -un importante órgano que nombra, destituye y disciplina a los jueces- como parte de las reformas del poder judicial.

La Comisión Europea, el ejecutivo de la UE, hizo de la reforma del poder judicial una de sus principales recomendaciones cuando ofreció a Ucrania el estatus de miembro candidato el pasado mes de junio, a pesar de la invasión rusa.

"A punto de alcanzar un hito en la reforma del sistema judicial ucraniano, tal y como defienden y apoyan los socios, incluida la UE, desde hace años", escribió Maasikas en Twitter.

"También forma parte de las 7 recomendaciones relacionadas con el estatus de Ucrania como país candidato a la UE. Confío en que los jueces ucranianos estarán a la altura de las circunstancias".

El parlamento ucraniano ya ha aprobado toda la legislación solicitada por la UE antes de que comiencen las conversaciones de adhesión, según declaró el presidente de la asamblea el mes pasado, pero se espera que el camino hacia la adhesión sea largo, posiblemente dure una década.

Algunos organismos de control también han advertido de que poderosos intereses están dispuestos a oponerse a las reformas, especialmente en el sistema judicial.

"No les interesa que haya ningún órgano disciplinario", afirmó el abogado Mykhailo Zhernakov, de la Fundación DEJURE, que supervisa las reformas judiciales.

Zhernakov y otros han expresado también su preocupación por una ley reciente que regula el nombramiento de los jueces del Tribunal Constitucional y que, según ellos, deja margen para la manipulación política.

Frans Timmermans, vicepresidente ejecutivo de la Comisión Europea, visitó Kiev el lunes, y el presidente Volodymyr Zelenskiy discutió los planes para una cumbre UE-Ucrania el 3 de febrero por teléfono con el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, el martes.