Después de abrir con una fuerte caída de más del 1,5% el viernes, en medio de la preocupación por el aumento de la inflación y la subida de los precios de la energía, la bolsa de Madrid recortó rápidamente sus pérdidas para cerrar con una tímida caída del 0,07%, hasta los 8.799 puntos. 
La tendencia se vio respaldada por la perspectiva de una apertura positiva en Estados Unidos, a pesar de que el índice del IPC aumentó un 3,4% en la zona euro (3% el mes pasado). 

En cuanto a los valores, International Consolidated ganó un 4,74%, Merlin Properties un 2,66% y Siemens Gamesa un 0,81%, mientras que ArcelorMittal y Melia Hotels fueron los que más bajaron, un 4,76% y un -1,13% respectivamente. 

Los índices estadounidenses terminaron al alza, gracias a la solidez de las estadísticas (el ISM manufacturero se situó en 61,1) y a que los ensayos clínicos de Merck demostraron que su píldora contra el covirus Molnupiravir reduce el riesgo de hospitalización o muerte en un 50%. El Dow Jones ganó un 1,43% hasta los 34326 puntos, el S&P500 un 1,15% hasta los 4357 puntos y el Nasdaq100 un 0,7%.

Hoy, los contratos Futures han reducido significativamente su ventaja, con la suspensión de Evergrande y el retroceso en Asia, y actualmente se espera que el IBEX35 caiga un 0,12%. 

Técnicamente, la volatilidad persiste. El mercado de Madrid vuelve a intentar rebotar en la zona de los 8700 puntos, pero ahora tendrá que superar los 8800 puntos para continuar hacia los 8900 puntos.