El gobierno del primer ministro Narendra Modi ya se ha opuesto a los recursos, incluidos algunos de parejas homosexuales, alegando que los matrimonios entre personas del mismo sexo no son "comparables con el concepto de unidad familiar indio de un marido, una mujer e hijos".

"Las peticiones, que sólo reflejan puntos de vista elitistas urbanos, no pueden compararse con la legislatura apropiada, que refleja los puntos de vista y las voces de un espectro mucho más amplio y se expande por todo el país", dijo el gobierno en un escrito presentado ante el Tribunal Supremo el domingo y visto por Reuters.

"Desestime el presente lote de peticiones por motivos de mantenibilidad", decía la presentación de 102 páginas, que añadía que cualquier decisión judicial de reconocer el matrimonio entre personas del mismo sexo significaría una "virtual reescritura judicial de toda una rama del derecho".

Un tribunal de cinco jueces encabezado por el presidente del Tribunal Supremo, Dhananjaya Yashwant Chandrachud, verá el caso a partir del martes y será retransmitido en directo en la página web del tribunal y en YouTube. El más alto tribunal del país despenalizó la homosexualidad en 2018 eliminando una prohibición de la época colonial sobre el sexo gay.

El gobierno dijo que tenía que "tener en cuenta los puntos de vista más amplios y la voz de toda la población rural, semirrural y urbana, los puntos de vista de las confesiones religiosas".

En los últimos meses se han presentado al menos 15 recursos ante el tribunal en los que se afirma que, sin reconocimiento legal, muchas parejas del mismo sexo no pueden ejercer derechos como los relacionados con el consentimiento médico, las pensiones, la adopción o incluso la pertenencia a clubes.

Los matrimonios entre personas del mismo sexo no están tan ampliamente aceptados en Asia como en Occidente.

Taiwán fue el primero de la región en reconocer este tipo de uniones, mientras que los actos entre personas del mismo sexo son ilegales en algunos países como Malasia. El año pasado, Singapur puso fin a la prohibición de las relaciones homosexuales, pero tomó medidas para prohibir los matrimonios entre personas del mismo sexo.

Japón es el único país del Grupo de los Siete países ricos que no reconoce legalmente las uniones entre personas del mismo sexo, aunque la opinión pública está ampliamente a favor de su reconocimiento.