La economía de Botsuana puede no alcanzar el objetivo de crecimiento del 4,2% fijado por el gobierno para este año, dijo el martes un alto funcionario del banco central, citando limitaciones mundiales y nacionales.

La ministra de Finanzas, Peggy Serame, hizo la proyección de un aumento del 4,2% del PIB en un discurso sobre el presupuesto en febrero, diciendo que el gobierno esperaba que el crecimiento se acelerara a partir de 2023 debido a un mejor rendimiento en el sector del diamante. El producto interior bruto crecerá un 2,7% en 2023.

Sin embargo, el sector minero de Botsuana, dominado por los diamantes, sigue atravesando dificultades, reflejo de la atonía del mercado mundial.

Las ventas de Debswana Diamond Company, una empresa conjunta entre el gobierno del país sudafricano y la unidad De Beers de Anglo American, descendieron cerca de un 48% interanual en el primer trimestre de 2024.

"Por lo que hemos visto en la primera mitad del año, las desfavorables condiciones económicas mundiales... así como las limitaciones estructurales internas, cabría esperar que es poco probable que alcancemos el crecimiento económico previsto", declaró Innocent Molalapata, director de investigación y estabilidad financiera del banco central, en una sesión informativa sobre economía.

"Por tanto, podría ser necesaria una revisión a la baja del objetivo de crecimiento", dijo Molalapata, añadiendo que la producción minera se contrajo aproximadamente un 27% en el primer trimestre.

El Banco de Botsuana no suele dar previsiones precisas sobre el crecimiento del PIB, dejando esa tarea al ministerio de finanzas.

El Fondo Monetario Internacional prevé que la economía de Botsuana crecerá un 3,6% en 2024.