Muhyiddin había dicho que había llegado el momento de traspasar el liderazgo de su partido Bersatu a un nuevo equipo, planteando interrogantes sobre quién dirigiría la alianza de la oposición dominada por los malayos, ya que el ex primer ministro es uno de sus pocos líderes con un amplio atractivo.

"Me quedaré para el último mandato (como presidente de Bersatu)", dijo Muhyiddin en un discurso en la reunión anual de Bersatu, que lidera el bloque opositor Perikatan Nasional junto con un partido islamista conservador.

Muhyiddin, que dirigió Malasia durante 17 meses entre 2020 y 2021, dijo que había tomado la decisión de quedarse tras consultar a su esposa.

No está claro, sin embargo, si algún miembro de Bersatu le disputará la presidencia durante las elecciones del partido del próximo año.

La oposición hizo incursiones entre los musulmanes de etnia malaya mayoritarios de Malasia durante los comicios regionales de agosto y las elecciones generales del año pasado.

Su popularidad entre los malayos más tradicionales y los votantes jóvenes se considera una amenaza para la alianza progresista y multiétnica del primer ministro Anwar Ibrahim.

Muhyiddin ha sido presidente de Bersatu desde su formación en 2016 y también preside el bloque opositor Perikatan Nasional.