El nuevo ministro de Energía y Minas de Senegal afirmó el jueves que el gobierno renegociará los contratos petroleros, gasísticos y mineros si es necesario, una vez finalizada la auditoría prometida.

El presidente Bassirou Diomaye Faye, que derrotó al candidato de la coalición gobernante en una aplastante victoria electoral el mes pasado, anunció la auditoría tras su toma de posesión el 2 de abril, asegurando a los inversores que seguían siendo bienvenidos en el país de África Occidental.

En algunas de sus primeras declaraciones desde su nombramiento la semana pasada como ministro de Energía y Minas, Birame Souleye Diop afirmó que un mayor control de los sectores era una de las prioridades de Senegal, que debe iniciar la producción de petróleo y gas este año.

Esto implicará "publicar los contratos, realizar una auditoría minera, trabajar en interés de la población y, si es necesario, renegociar todos los contratos existentes", declaró.

Entre las empresas implicadas en el sector se encuentran BP y la estadounidense Kosmo Energy, que lideran el desarrollo de Greater Tortue Ahmeyim, el primer proyecto de GNL de Senegal.

La australiana Woodside Energy posee el 82% del yacimiento de petróleo y gas de Sangomar, en el mar de Senegal, que se espera que empiece a producir petróleo a mediados de 2024.

"Nos esforzaremos por promover los recursos entre nuestros socios de forma estrictamente acorde con los intereses de la población senegalesa", añadió Diop en una entrevista a una radio local.

Los comentarios de Diop sugieren que el nuevo gobierno de coalición de Faye está dispuesto a seguir adelante con algunas de sus promesas electorales más radicales, que incluían la renegociación de este tipo de contratos con los operadores extranjeros en Senegal.

Esta política contrasta con el enfoque más favorable a los inversores del predecesor de Faye, Macky Sall, cuya ambiciosa estrategia centrada en las infraestructuras no consiguió crear suficientes puestos de trabajo ni aliviar el creciente coste de la vida en Senegal.

El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha pronosticado que la próxima producción de petróleo y gas de Senegal impulsará el crecimiento económico a dos dígitos el próximo año.