La Administración del Ciberespacio de China (CAC) afirmó en un comunicado el viernes que había cerrado 67.000 cuentas de medios sociales y borrado cientos de miles de publicaciones entre el 10 de marzo y el 22 de mayo como parte de una campaña de "rectificación" más amplia.

Desde 2021, China ha puesto en el punto de mira miles de millones de cuentas de medios sociales en un intento de "limpiar" su ciberespacio y facilitar su control por parte de las autoridades.

La última ofensiva se centró en cuentas de populares aplicaciones chinas de medios sociales, como WeChat, Douyin y Weibo, que entran en la categoría de "medios propios", un término que se refiere en sentido amplio a las cuentas que publican noticias e información pero que no están gestionadas por el gobierno ni aprobadas por el Estado.

Pekín detiene con frecuencia a ciudadanos y censura cuentas por publicar o compartir información objetiva considerada sensible o crítica con el Partido Comunista, el gobierno o el ejército, especialmente cuando dicha información se vuelve viral.

De las 67.000 cuentas cerradas definitivamente, casi 8.000 fueron retiradas por "difundir noticias falsas, rumores e información perjudicial", según el CAC.

Alrededor de otras 930.000 cuentas recibieron castigos menos severos, desde la retirada de todos sus seguidores hasta la suspensión o cancelación de sus privilegios lucrativos.

En una campaña separada, el regulador cerró recientemente más de 100.000 cuentas que supuestamente tergiversaban a presentadores de noticias y agencias de medios para contrarrestar el aumento de la cobertura de noticias falsas en línea con la ayuda de las tecnologías de IA.

El viernes, la CAC informó de que su última campaña se había centrado en casi 13.000 cuentas militares falsificadas, con nombres como "Comando del Ejército Rojo Chino", "Fuerza Antiterrorista China" y "Fuerza de Misiles Estratégicos".

Otras 25.000 cuentas fueron sancionadas por hacerse pasar por instituciones públicas, como centros de control y prevención de enfermedades e institutos de investigación estatales.

Casi 187.000 fueron sancionadas por hacerse pasar por empresas de medios de comunicación, mientras que más de 430.000 ofrecían supuestamente asesoramiento profesional o servicios educativos sin tener las cualificaciones profesionales pertinentes.

Alrededor de 45.000 cuentas fueron cerradas por "exagerar temas candentes, persecución de nubes y monetización ilegal".

El regulador dijo que se había "coordinado activamente con la seguridad pública, la supervisión del mercado y otros departamentos, para asestar un duro golpe y rectificar los 'automedios' ilegales".

"Al mismo tiempo, (también) hacemos un llamamiento a la mayoría de los internautas para que participen activamente en la vigilancia y la denuncia (de los 'automedios' ilegales), proporcionen pistas... y mantengan conjuntamente un ciberespacio limpio", añadió.