Japón también informó del lanzamiento, y el secretario jefe del gabinete, Hirokazu Matsuno, lo condenó como una amenaza para la paz y la seguridad, mientras que China instó a todas las partes a preservar la estabilidad.
"Hacemos un llamamiento a las partes implicadas para que tengan en cuenta la paz y la estabilidad generales en la península", dijo el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Zhao Lijian, en una sesión informativa diaria en Pekín cuando se le preguntó por el presunto lanzamiento.
Corea del Norte, dotada de armas nucleares, ya había realizado otras tres pruebas de misiles en menos de dos semanas antes del lunes, una serie de lanzamientos inusualmente rápida. Dijo que dos de ellos implicaban "misiles hipersónicos" individuales capaces de alcanzar una gran velocidad y de maniobrar después del lanzamiento, mientras que una prueba realizada el viernes implicaba un par de misiles balísticos de corto alcance disparados desde vagones de tren.
El lanzamiento del lunes parecía implicar dos misiles balísticos de corto alcance disparados hacia el este desde el aeródromo de Sunan en Pyongyang, dijo el Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur (JCS) en un comunicado.
Corea del Norte utilizó el aeropuerto para probar el misil balístico de alcance intermedio Hwasong-12 (IRBM) en 2017, con la presencia del líder Kim Jong Un.
Los misiles disparados el lunes recorrieron unos 380 km y alcanzaron una altitud máxima de 42 km, dijo el JCS en un comunicado.
El ministro de Defensa japonés, Nobuo Kishi, dijo que los misiles parecían haber caído en el océano frente a la costa oriental de Corea del Norte y que era evidente que Corea del Norte estaba utilizando los frecuentes lanzamientos para mejorar su tecnología de misiles.
"Los repetidos lanzamientos de misiles balísticos de Corea del Norte son un grave problema para la comunidad internacional, incluido Japón", dijo Kishi a los periodistas, señalando que las pruebas eran una violación de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU que prohíben a Corea del Norte todo desarrollo de misiles balísticos.
El Comando Indo-Pacífico del ejército estadounidense dijo que el lanzamiento no suponía una amenaza inmediata para Estados Unidos o sus aliados, pero que "estos lanzamientos de misiles ponen de manifiesto el impacto desestabilizador del programa de armas ilícitas (de Corea del Norte)".
El ritmo de las pruebas sugiere que Corea del Norte tiene suficientes misiles como para sentirse cómoda al utilizarlos en pruebas, entrenamientos y demostraciones, y refuerzan su credibilidad disuasoria al enfatizar el volumen de su fuerza de misiles, dijo Mason Richey, profesor de la Universidad Hankuk de Estudios Extranjeros en Seúl.
Corea del Norte no ha probado sus misiles balísticos intercontinentales (ICBM) de más largo alcance ni sus armas nucleares desde 2017, pero tras el estancamiento de las conversaciones de desnuclearización en 2019, comenzó a probar una serie de nuevos diseños de SRBM.
Muchos de los últimos SRBM, incluidos los misiles hipersónicos, parecen diseñados para evadir las defensas antimisiles. Corea del Norte también ha prometido buscar armas nucleares tácticas, lo que podría permitirle desplegar ojivas nucleares en los SRBM.
"Cada lanzamiento de misiles tácticos hace alarde de lo poco que las sanciones han limitado al régimen de Kim, y de cómo Estados Unidos... no ha conseguido que Corea del Norte pague un coste suficiente por el desarrollo del programa de misiles de corto alcance", dijo Richey.
AISLAMIENTO Y ASFIXIA
Los últimos lanzamientos han suscitado tanto la condena como un llamamiento al diálogo por parte de una administración estadounidense que ha impuesto nuevas sanciones por los lanzamientos de misiles norcoreanos y está presionando para que haya más.
La administración del presidente Joe Biden impuso el miércoles sus primeras sanciones nuevas a Pyongyang y pidió al Consejo de Seguridad de la ONU que incluyera en su lista negra a varias personas y entidades norcoreanas. También repitió los llamamientos para que Corea del Norte regrese a las conversaciones destinadas a reducir la tensión y persuadirla de que entregue su arsenal de armas nucleares y misiles balísticos.
Corea del Norte ha defendido las pruebas de misiles como su derecho soberano a la autodefensa y ha acusado a Estados Unidos de intensificar intencionadamente la confrontación con nuevas sanciones.
En una declaración antes de las pruebas del viernes, el Ministerio de Asuntos Exteriores norcoreano dijo que aunque Estados Unidos hablara de diplomacia y diálogo, sus acciones mostraban que estaba enfrascado en su política de "aislamiento y asfixia" de Corea del Norte.
El Consejo de Seguridad Nacional de Corea del Sur celebró una reunión de emergencia tras el ensayo del lunes, en la que sus miembros subrayaron que era esencial iniciar el diálogo lo antes posible para evitar que la situación se volviera más tensa y restablecer la estabilidad, dijo la Casa Azul presidencial en un comunicado.
Los lanzamientos se produjeron en un momento en que Corea del Norte, más aislada que nunca bajo los cierres fronterizos autoimpuestos para evitar una pandemia de COVID-19, parecía estar preparándose para abrir al menos parte del comercio a través de su frontera terrestre con China.
Los trenes de mercancías que conectan China con Corea del Norte se han reanudado por primera vez desde el cierre fronterizo por el coronavirus de 2020, según informó el lunes el Ministerio de Asuntos Exteriores chino
Zhao Tong, un experto en política nuclear con sede en Pekín de la Fundación Carnegie para la Paz Internacional, dijo que Corea del Norte tenía pocas razones para frenar su desarrollo de misiles.
El líder Kim parecía tener pocas esperanzas de llegar a un acuerdo con Estados Unidos, y la simpatía de China por Corea del Norte y la antipatía hacia Estados Unidos podrían animar a Corea del Norte a pensar que es poco probable que China apoye cualquier esfuerzo de la comunidad internacional para censurarla por las pruebas, añadió.
"Corea del Norte puede pensar que es un momento seguro para avanzar en el desarrollo de sus misiles", dijo Zhao.
La semana pasada, China criticó las nuevas sanciones de Estados Unidos, pero también pidió a todas las partes que actuaran con prudencia y entablaran un diálogo para reducir las tensiones.
