El loonie cotizaba un 0,3% a la baja, a 1,3565 por dólar estadounidense, o 73,72 centavos de dólar, tras tocar su nivel intradía más débil desde el 12 de diciembre, a 1,3613.
La tasa de inflación de Canadá se enfrió en febrero a una tasa anual del 2,8%, su ritmo más lento desde junio, y las medidas de inflación subyacente estrechamente vigiladas se relajaron a mínimos de más de dos años.
"La economía canadiense es mucho más débil de lo que sugieren los datos principales, y ahora estamos empezando a ver que esa debilidad se manifiesta en casi todos los indicadores macroeconómicos, incluso en las medidas de inflación subyacente preferidas por el Banco de Canadá, que fueron un importante punto de fricción para el banco en 2023", afirmó Simon Harvey, jefe de análisis de divisas de Monex Europe y Monex Canada.
Los mercados monetarios ven un 75% de probabilidades de que el BoC flexibilice en junio, frente a aproximadamente un 50% antes de los datos.
"El Banco de Canadá se encuentra en una situación difícil", afirmó Darcy Briggs, gestor de carteras de Franklin Templeton Canada.
"Los datos por sí solos... sugerirían que el Banco de Canadá tiene luz verde para recortar los tipos, pero están un poco atados a la política de la Reserva Federal. Y parte de eso tiene que ver con que si empiezan a recortar demasiado pronto o en mayor cuantía, entonces podría producirse una depreciación bastante drástica del loonie."
A los inversores les preocupa que la Reserva Federal revele el miércoles nuevas proyecciones económicas que apunten a menos recortes de los tipos de interés y a un inicio más tardío del ciclo de relajación de la política monetaria.
Los rendimientos de los bonos canadienses cayeron en toda la curva. El bono a 2 años bajó 12,5 puntos básicos, al 4,174%, tras registrar el lunes su nivel intradía más alto en un mes, al 4,318%. (Reportaje de Fergal Smith Edición de Bernadette Baum y Nick Zieminski)
