Según un comunicado de la policía, el incidente tuvo lugar en las primeras horas del jueves en la fábrica de misiles Pivdenmash, en la ciudad central de Dnipro, durante la entrega de armas a los guardias.

Cuatro militares y una mujer civil fueron asesinados por el soldado, que iba armado con un fusil de asalto AK-47 y 200 cartuchos.

El ministro del Interior, Denys Monastyrskiy, nombró al soldado como Artem Ryabchuk y dijo que "asumirá la más estricta responsabilidad prevista por la ley".

Monastyrskiy dijo que se crearía una comisión especial para investigar todas las circunstancias que pudieran haber conducido al crimen.

El viceministro del Interior, Anton Gerashchenko, dijo que la investigación se centraría en el motivo del tirador. "En primer lugar, se estudiará la cuestión de si el militar se enfrentó a presiones psicológicas en (su) equipo", dijo Gerashchenko.

Los investigadores también estudiarán cómo el soldado superó un examen médico que le habilitaba para acceder a las armas.