Estados Unidos recibió el martes al ministro de Planificación e Inversiones de Vietnam para mantener conversaciones sobre la mejora de la cooperación económica y afirmó que los lazos son más fuertes que nunca, días después de que Hanoi disgustara a Washington al recibir al presidente ruso, Vladímir Putin.

El Departamento de Estado dijo que el diálogo de esta semana abarcaría la seguridad económica, los semiconductores, el clima de inversión, la economía digital, el ciberespacio, la energía y los minerales críticos. El año pasado, Washington elevó los lazos entre Estados Unidos y Vietnam a la categoría de "asociación estratégica integral".

La visita del presidente ruso Vladimir Putin a Vietnam la semana pasada suscitó duras críticas por parte de Estados Unidos. Posteriormente, Washington dijo que seguiría centrado en profundizar los lazos con Hanoi mientras Estados Unidos trabaja para contrarrestar la rivalidad con China.

Estados Unidos debe decidir antes del 26 de julio si eleva a Vietnam al estatus de economía de mercado, lo que reduciría los punitivos aranceles antidumping fijados a las importaciones vietnamitas dado su actual estatus de economía no de mercado marcada por una fuerte influencia estatal.

"La relación entre Vietnam y Estados Unidos es tan fuerte, creemos, como lo ha sido nunca", declaró el subsecretario estadounidense de Crecimiento Económico, Energía y Medio Ambiente, José Fernández.

Dijo en la sesión inaugural que el comercio entre EE.UU. y Vietnam ascendía actualmente a 124.000 millones de dólares, lo que convierte a Vietnam en el noveno socio de EE.UU. en el comercio de bienes.

Dirigiéndose al ministro vietnamita de Planificación e Inversión, Nguyen Chi Dung, Fernández dijo que las empresas estadounidenses estaban "muy entusiasmadas" con Vietnam, pero añadió:

"Tenemos que tener en cuenta que aunque los inversores están entusiasmados con Vietnam, queremos asegurarnos de que cuentan con el entorno regulador y de toma de decisiones... que necesitan para continuar su expansión en su país".

En enero, Fernández dijo en Vietnam que 15 empresas estadounidenses, incluidas firmas de semiconductores, habían expresado su interés en invertir 8.000 millones de dólares en Vietnam en infraestructuras de energías limpias, supeditado a los avances del país en las normas sobre energías renovables.

Vietnam quiere atraer a los fabricantes de chips e impulsar su sector de energías renovables, pero ha tenido dificultades para adoptar normas que permitan la expansión de su industria solar y eólica terrestre y el desarrollo de parques eólicos marinos.

El lunes, Estados Unidos mejoró la clasificación de Vietnam en un informe sobre tráfico de seres humanos, al tiempo que citaba la preocupación de que Hanoi no hubiera iniciado investigaciones sobre los funcionarios del gobierno cómplices en los delitos de tráfico.

Hanoi ha advertido de que mantener el estatus de economía no de mercado sería muy perjudicial para los lazos bilaterales.

Los fabricantes de acero estadounidenses, los camaroneros de la Costa del Golfo y los productores de miel se oponen a una mejora, pero cuenta con el respaldo de los minoristas estadounidenses y algunos otros grupos empresariales. (Reportaje de Simon Lewis, David Brunnstrom; Edición de David Gregorio)