SDE BOKER, Israel, 28 mar (Reuters) - Los principales diplomáticos de Estados Unidos y de cuatro países árabes se reunieron el lunes en Israel en una muestra de unidad contra Irán, pero también aprovecharon la cumbre extraordinaria para presionar a su anfitrión a fin de que reanude las negociaciones de paz con los palestinos, estancadas desde hace tiempo.

En la conclusión de los dos días de discusiones en un refugio en el desierto donde está enterrado su fundador, David Ben-Gurion, Israel dijo que el evento se repetiría y ampliaría a medida que construyera lazos comerciales y de seguridad con los Estados árabes sunitas, de ideas afines.

"Esta nueva arquitectura --las capacidades compartidas que estamos construyendo-- intimida y disuade a nuestros enemigos comunes, en primer lugar a Irán y sus fuerzas aliadas", dijo el ministro de Asuntos Exteriores, Yair Lapid, junto a sus homólogos estadounidense, emiratí, bareiní, marroquí y egipcio.

A Israel y a algunos países árabes les preocupa que un incipiente acuerdo nuclear con Irán deje a la potencia persa en posesión de los medios necesarios para construir una bomba y reforzar las guerrillas respaldadas por Teherán.

Estados Unidos y otras potencias mundiales consideran que restaurar el acuerdo nuclear iraní de 2015 es su mejor opción. Sin embargo, el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, ofreció a los aliados regionales de Washington garantías en caso de que fracase la diplomacia.

"Como vecinos y, en el caso de Estados Unidos, como amigos, también trabajaremos juntos para hacer frente a los desafíos y amenazas comunes en materia de seguridad, incluidos los procedentes de Irán y sus apoderados", dijo.

EAU, Baréin y Marruecos normalizaron sus lazos con Israel en virtud de una iniciativa estadounidense de 2020 conocida como los Acuerdos de Abraham. Egipto se convirtió en 1979 en el primer Estado árabe en firmar la paz con Israel.

Al tiempo que saludaba los acuerdos, Blinken añadió: "Tenemos que tener claro que estos acuerdos de paz regionales no son un sustituto del progreso entre palestinos e israelíes".

Al igual que los países árabes presentes, Estados Unidos quiere una solución de dos Estados en la que los palestinos obtengan la condición de Estado junto a Israel. Las conversaciones con ese fin se estancaron en 2014. Israel ha colonizado gran parte de la Cisjordania ocupada, mientras que la Franja de Gaza, otro territorio palestino, está gobernada por islamistas de línea dura.

El Gobierno de coalición interpartidista del primer ministro israelí Naftali Bennett ha dicho que no se dan las condiciones para una reanudación de la diplomacia con los palestinos --que, por su parte, han hecho recaer la responsabilidad en Israel--.

"A menos que la ocupación termine, las reuniones de normalización árabe no son más que una ilusión y una recompensa gratuita para Israel", dijo el lunes el primer ministro palestino, Mohammed Shtayyeh, a su gabinete.

El rey Abdalá de Jordania llegó a Ramala para mantener conversaciones con el presidente palestino Mahmud Abás. Se trata de la primera visita de este tipo en años y se prevé que se centre en los esfuerzos para reducir las tensiones regionales antes del mes sagrado musulmán del Ramadán.

Israel se vio sacudido el domingo por un tiroteo protagonizado por dos ciudadanos árabes alineados con el Estado Islámico que dejó dos policías muertos. El ministro marroquí de Asuntos Exteriores, Nasser Bourita, dijo que su presencia junto a los demás delegados árabes en la cumbre organizada por Israel era "la mejor respuesta a tales ataques".

El ministro de Asuntos Exteriores de Baréin, Abdullatif Al Zayani, calificó los debates de útiles para defenderse de los grupos respaldados por Irán, como Hezbolá. "Por supuesto, parte de este proceso será la renovación de los esfuerzos para resolver el conflicto palestino-israelí", añadió.

En otra señal de que los aliados estaban cerrando filas contra Irán, el embajador israelí en Manama, Eitan Naeh, dijo el lunes que Israel nombrará pronto un agregado militar en el cuartel general de la Quinta Flota de la Armada estadounidense en Baréin.

(Información adicional de Maayan Lubell en Jerusalén; Nidal al-Mughrabi en Gaza y Ali Sawfta en Ramallah; redacción de Dan Williams, edición de Ed Osmond, William Maclean, Philippa Fletcher; traducción de Flora Gómez)