Uss se encontraba bajo arresto domiciliario en su casa de Basiglio, en las afueras de Milán, pero huyó un día después de que un tribunal milanés acordara su traslado a Estados Unidos para enfrentarse a los cargos de envío de petróleo desde Venezuela incumpliendo las sanciones, y de fraude bancario.

Su etiqueta electrónica de seguimiento emitió una alarma cuando salió de casa, pero había desaparecido cuando la policía llegó a la villa.

En un comunicado hecho público a última hora del viernes, el Tesoro dijo que había aprobado un decreto por el que se congelaban los activos pertenecientes a Uss en Italia, incluida una participación minoritaria en una empresa privada, su villa en Basiglio y una cuenta bancaria con más de 160.000 euros.

Uss declaró a la agencia de noticias rusa RIA a principios de este mes que los cargos estadounidenses contra él tenían una motivación política.

Su fuga ha avergonzado al gobierno y la primera ministra Giorgia Meloni también ha criticado la decisión inicial de conceder a Uss el arresto domiciliario.

El ministro de Justicia italiano ha iniciado acciones disciplinarias contra tres jueces que concedieron el arresto domiciliario, según declararon a principios de esta semana dos fuentes con conocimiento directo del asunto.