El huracán Beryl, una tormenta de categoría 2, tocó tierra en los principales destinos turísticos de México a primera hora del viernes, provocando una alerta roja en la región tras su mortífero rastro de destrucción en varias islas del Caribe.

La tormenta, que se espera traiga consigo una peligrosa marejada y olas potencialmente dañinas, presenta vientos de hasta 175 km/h (110 mph), según informó el Centro Nacional de Huracanes (CNH) de EE.UU., al entrar al noreste de Tulum, en la península de Yucatán.

El huracán Beryl, el primero de la temporada atlántica de 2024, fue en su momento una tormenta de categoría 5, lo que la convierte en la tormenta de categoría 5 más temprana de la que se tiene constancia. Los científicos creen que esta extraordinaria temporada de tormentas está alimentada por el cambio climático.

Beryl se encuentra a unos 10 km al este de Tulum, un popular centro turístico mexicano.

Las condiciones de huracán están afectando a la península de Yucatán, y se ha emitido un aviso de huracán para la costa desde Puerto Costa Maya hasta Cancún, incluyendo Cozumel.

La agencia de protección civil de México ha emitido una alerta roja, señalando una amenaza de peligro máximo. La agencia ha aconsejado a los residentes que permanezcan en sus casas o busquen refugio en refugios contra tormentas.

El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, se hizo eco de este consejo, instando a quienes se encuentran en la trayectoria de la tormenta a buscar refugio. Destacó la importancia de priorizar la vida sobre las posesiones materiales en una publicación en las redes sociales.

En Quintana Roo, sede de Cancún, la gobernadora Mara Lezama publicó un vídeo del centro de Tulum que mostraba los fuertes vientos y la lluvia que ya afectaban a la región. Instó a los residentes a tomar todas las precauciones necesarias ya que se espera que el impacto de la tormenta se sienta en todo el estado.

Las escuelas de Quintana Roo han sido cerradas y el Ministerio de Defensa de México ha abierto alrededor de 120 refugios contra tormentas en la zona.

Antes de llegar a México, el huracán Beryl causó estragos en el Caribe. Arrasó Jamaica, Granada, San Vicente, las Granadinas y el norte de Venezuela, cobrándose al menos 11 vidas, derribando edificios y arrancando árboles.

El número de muertos puede aumentar a medida que se disponga de más información.

Se espera que el huracán Beryl se debilite rápidamente al cruzar la península de Yucatán, pero se prevé que recupere fuerza cuando se desplace sobre el Golfo de México. El NHC prevé que la tormenta se desplace hacia el noreste de México y el sur de Texas hacia el final del fin de semana.

El huracán Beryl provocó la evacuación de unos 3.000 turistas de Isla Mujeres, una isla cercana a Cancún, según informó el director de turismo de la isla, José Magaña. Muchos residentes, incluidos pescadores, han buscado refugio en previsión del impacto de la tormenta.

El jueves se cancelaron unos 100 vuelos en el aeropuerto internacional de Cancún, lo que provocó que muchos turistas se apresuraran a coger los últimos vuelos de salida.

No se espera que las principales plataformas petrolíferas de México, situadas principalmente en el sur del Golfo de México, se vean afectadas o paralizadas, pero los proyectos petrolíferos en aguas estadounidenses al norte podrían verse afectados si el huracán sigue su trayectoria prevista.

(Información de Zahra Burton en Kingston, José de Jesús Cortes y Raquel Cunha en Tulum, y Paola Chiomante en Cancún; Información adicional de Brendan O'Boyle en Ciudad de México, Robertson Henry en San Vicente, Natalia Siniawski en Gdansk y Brijesh Patel en Bengaluru; Redacción de Cassandra Garrison y David Alire Garcia; Edición de Bill Berkrot, Kim Coghill, Stephen Coates y Barbara Lewis)