El ejecutivo, conocido por películas como "Ford contra Ferrari", la reposición de "El planeta de los simios" y "Figuras ocultas", va a crear North Road Co, para producir películas y programas de televisión para los mercados estadounidense e internacional.

El estudio combinará la productora de cine y televisión homónima de Chernin, Chernin Entertainment, con otros dos estudios. El 30 de junio adquirió a ProSiebenStat.1 Media SE las operaciones en Estados Unidos de Red Arrow Studios, creadora del reality show de Netflix "Love is Blind", en un acuerdo que una fuente valoró en 180 millones de dólares.

Por otra parte, North Road se hizo con la propiedad de Words + Pictures, una productora de documentales, comprando la participación del cofundador de Chernin Entertainment, Connor Schell.

Chernin recaudó 500 millones de dólares en financiación de capital de Providence Equity Partners, y otros 300 millones de dólares en financiación de deuda a través de filiales gestionadas de Apollo Advisors, para ejecutar la expansión. Dijo a Reuters que cree que el gasto de la industria en películas y series de televisión con guiones, reality shows y contenidos producidos fuera de Estados Unidos seguirá creciendo a medida que los servicios de streaming compitan por atraer nuevos suscriptores.

"Hay cientos de millones de suscriptores fuera de Estados Unidos por los que todos van a competir agresivamente", dijo Chernin.

Las redes de cable y las emisoras son otros clientes.

Muchos en la industria temen que se avecine una era de restricción fiscal, ya que Hollywood reevalúa su gasto en contenidos en medio de preguntas sobre la economía subyacente del streaming. Un puñado de proyectos, como "Demimonde" de J.J. Abrams para HBO Max y la serie de animación "Wings of Fire" de Ava DuVernay para Netflix, han sido cancelados.

Chernin, cuyo estudio está realizando dos películas para Netflix y nuevas temporadas de sus series para Apple TV+ "See" y "Truth be Told", dijo que ha visto duplicarse el negocio de guiones de su estudio año tras año. Hay un apetito creciente por las producciones internacionales, así como por los programas de telerrealidad, lo que le impulsó a ampliar las capacidades del estudio.

Preguntado por su decisión de pasar de ser un posible vendedor, como se informó a finales de 2021, a un comprador, Chernin respondió: "Creo que habría sido miope vender".